
ProA Capital, fondo que tiene como socios a Fernando Ortiz, Carlos Gordillo, Santiago Gómez y Vito Torciano, ha cerrado el último año con cifras récord en Moyca, su compañía agraria, en un momento en el que el interés por la compañía ha repuntado por parte de grupos industriales y financieros. La empresa especializada en la producción de uvas sin pepitas terminó 2024 con unos ingresos que alcanzaron los 190 millones de euros y un resultado bruto de explotación (ebitda) cercano a los 29 millones de euros, según explican distintas fuentes consultadas por elEconomista.es.
La empresa luce así mejores credenciales en el mercado después de que el pasado año diera mandato a Deutsche Bank en busca de comprador. Hasta el momento, las muestras de interés no se han traducido en ofertas en firme por la empresa agrícola, si bien se han acercado a la empresa inversores estadounidenses, el grupo peruano Gloria e incluso otro grupo agrícola, Citri&Co, que también está participado por un private equity, Miura Capital, señalan otras voces consultadas. Este último candidato, además, se encuentra también explorando en paralelo su venta, en un proceso que coordinan Greenhill y William Blair y ha estado cerca de culminar con el traspaso de la compañía al gigante canadiense PSP.
La mejora de las cifras vitales de Moyca, que ha pasado de producir hasta 54 variedades de uva (ecológica, blanca, negra y roja, principalmente) tras pasar de 1.400 hectáreas a 2.300, se debe a varios factores, entre ellos una mejor campaña de cosecha tras malos ejercicios marcados por la lluvia. Otro factor que ha lastrado la rentabilidad de la empresa han sido los incrementos en los gastos de explotación relativos a la subida del salario mínimo interprofesional. Desde la entrada de la gestora en el capital, los ingresos se han casi duplicado y el ebitda ha crecido desde los 20 hasta los 29 millones de euros.
Queda por ver la valoración que el mercado da a la compañía si durante esta segunda mitad de año finalmente se encuentra relevo en el capital. Moyca compró Sociedad Agraria de Transformación (SAT), cabecera del negocio de la empresa de uvas sin pepita, hace más de cinco años. La transacción se gestó desde la primavera de 2018, pero el fondo de capital privado inició un periodo de negociaciones en exclusiva con la familia Cánovas -los fundadores y propietarios hasta esa fecha- a principios del mes de septiembre. ProA superó así ofertas de otros fondos que también se habían interesado por esta compañía. La previsión es que ahora la transacción se firme a múltiplos de entre seis y siete veces ebitda.
Operaciones en el campo
La batería de operaciones en el campo por parte de los fondos de capital privado sigue así aumentando. La última transacción de este tipo la ha protagonizado MCH Private Equity con la compra de la portuguesa Vale Da Rosa, mientras que Alantra trata de vender su participación en Agrolives y Realza ha encallado la venta de Cualin Quality.