La inversión extranjera (FDI por sus siglas en inglés) en Europa está consiguiendo dejar atrás la crisis económica provocada por el Covid-19 y ha cerrado 2021 con un aumento del 5% en el número de proyectos anunciados con respecto a los datos registrados en 2020, según el último informe European Attractiveness Survey de EY.
En lo que respecta a España se mantiene como uno de los países favoritos de los inversores, hasta tal punto que ocupa la cuarta posición a nivel europeo con 361 proyectos de inversión extranjera, lo que supone un 2% más en comparación con 2020. Pese a que el dato supone un crecimiento está todavía muy lejos de las cifras registradas antes de la pandemia, cuando en España se alcanzaron los 486 proyectos.

Por comunidades autónomas, han liderado la clasificación de proyectos atraídos en 2021: Madrid (150), Cataluña (89), Andalucía (46), Comunidad Valencia (24), Aragón (12), Castilla La Mancha (10), Castilla y León (9), País Vasco (8), Galicia y Extremadura (3 cada uno) y Murcia, Canarias y Baleares (2 cada uno). Por sectores, los del Software & IT Services (76), Transporte y Logística (44) y Finanzas (39), fueron los más desarrollados.
"Conservar un año más la cuarta posición de Europa en atractivo inversor extranjero sigue siendo muestra de la alta competitividad de España en el mercado europeo. Y, por tanto, de que sigue jugando en la primera división entre los países que mejores cualidades presentan para atraer inversiones. Se trata de un mercado interno compuesto por 47 millones de consumidores, al que hay que sumar la llegada de 68 millones de turistas internacionales cada año", detalla a elEcononomista.es Curro Rahola, socio responsable de Mercados de EY.
El experto de la consultora destaca que la inversión extranjera en España a sido un factor determinante para el desarrollo económico de las últimas décadas, salvo el parón que supuso la pandemia.
"A pesar de las circunstancias y de todos los deberes que nos faltan por hacer, España sigue siendo un país competitivo y, sobre todo, con gran potencial de crecimiento. Factores como su clima benévolo contribuyen a potenciar su atractivo inversor en sectores, como el turístico, y son una oportunidad para otros, como el de las renovables, donde ya ocupamos la novena posición mundial en atractivo inversor", argumenta.
"Otros factores relevantes resultan también su relativa estabilidad jurídica, social, económica, o su reconocido sistema sanitario", finaliza Rahola.