El presidente de Cantabria en funciones, Miguel Ángel Revilla, ha señalado que "la grandeza de las personas" no se mide por las victorias, cuando "todo son aplausos y felicitaciones", sino que "a las personas hay que medirlas en las derrotas".
"Cuando uno cree que puede conservar la Presidencia y no la conserva es cuando se da la talla", ha declarado el regionalista en una entrevista concedida a Europa Press, en la que ha precisado que, en tales circunstancias, se da la talla no solo "en lo personal", sino también "la talla de los que están alrededor".
"Cuando uno es presidente, los teléfonos no paran de llamar. Y cuando deja de ser presidente es un momento en el que es interesante seleccionar quienes verdaderamente sabes que puedes contar con ellos para siempre", ha argumentado.
Llamadas de ánimo
En este sentido, Revilla ha indicado que tras las elecciones, -en las que el PP cántabro ha ganado con mayoría absoluta-, ha recibido "muchas llamadas" de "muchos militantes" que le dan "ánimo", toda vez que el PRC ha tenido "el mejor resultado de la historia" ya que han "subido en plena crisis" aunque "el socio (PSOE) se nos ha venido abajo".
El candidato regionalista ha explicado que lo que ha ocurrido en los comicios es "muy sencillo". Así, ante una crisis "tan tremenda" como la que tiene España y, "en menor medida" Europa, los ciudadanos "tienen que castigar" en las urnas a "quien está en ese momento en el gobierno".
"Es una catástrofe para el PSOE"
De este modo, el PSOE "paga las consecuencias" de una situación que, si bien "en parte" es "mundial", en otra "parte" los ciudadanos la "achacan a una gestión deficitaria del partido socialista" y, en consecuencia, "les ha llevado por delante".
"Los ciudadanos, cuando están indignados, no van a protestar al vecino, tienen que protestar concretamente al que está gobernando", ha sentenciado Revilla, que ha reconocido que no se esperaba que el PSOE cántabro perdiera "tanto". "No hemos conseguido parar el tsunami del PP", ha apostillado.
Ha indicado al respecto que "se veía una marea en todos los sitios", una marea "general" ante la que "no se salva nadie". "Es una catástrofe para el partido socialista y no hay más análisis", ha zanjado Revilla, para apuntar que esto está ocurriendo también en las elecciones alemanas y, según ha vaticinado, sucederá "probablemente" en Italia y Francia.
"Los ciudadanos están cabreados, indignados. Hay una situación terrible que no se conocía en España" y "es lógico" que los ciudadanos "miren hacia quien está gobernando". Así, ha insistido, si la coyuntura económica es negativa "la paga quien está gobernando", al igual que ocurre en "épocas de auge", que son "favorables" a los partidos que están en el Ejecutivo.
"Me hubiera gustado seguir de presidente, pero hay que aceptar democráticamente el veredicto de las urnas. Yo soy un demócrata convencido", ha manifestado Revilla, que felicita a los que han ganado.
Así, desea que el PP, que "parece que tiene soluciones para todo", "las aplique y nos saque de esta situación de angustia que vive el país y tantas familias".
En la oposición
De cara a su futuro, Revilla ha asegurado que va a "cumplir diariamente con el papel honroso de ser diputado regional", como lo hizo durante los quince años que estuvo en la oposición. "No se me van a caer los anillos por volver a desempeñar ese papel", ha asegurado.
Así, ha insistido que él no va a hacer como otros ex presidentes, que "parece que cuando pierden" la presidencia "se van al Congreso, al Senado o algún Consejo de Administración".
"Voy a desempeñar mi papel de diputado con la misma intensidad, que he desempeñado el papel de presidente de Cantabria que ha sido lo más grande que me ha podido ocurrir en esta vida", ha enfatizado.
El "tsunami" que Revilla temía
