Canarias

La psicosis de Canarias de 1991 que nadie quiere recordar por el coronavirus

  • Ese año Canarias comenzó a atravesar un proceso de psicosis colectiva producto de la Guerra del Golfo I.
  • Este 2020 los isleños contienen la respiración por la crisis que ya se percibe en el archipiélago por el coronavirus.
Las Palmas de Gran Canariaicon-related

En el año 1991 Canarias comenzó a atravesar un proceso de psicosis colectiva producto de la Guerra del Golfo I. Este 2020 los isleños contienen la respiración por la crisis que ya se percibe en el archipiélago por el coronavirus.

Descenso de ventas de unidades de alojamiento en turismo y el cierre del mercado interior en previsión de contagios por la pandemia. Nadie quiere recordar el periodo en el que se lanzó la población en masa a comprar velas, azúcar, productos de higiene personal, agua, aceite o leche en polvo. En el sector turístico se intenta que los turistas descansen al tiempo que se revisan todos los procedimientos de control. En las islas el Covid19 llegó con turistas de Italia. 

En aquella época de principios de los Noventa en Canarias no había hipermercados aunque sí cadenas como Hiperdino, Básico, Ecoteide, Hipertrébol o Cruz Mayor. Apenas las islas habían entrado en la UE dado su régimen aduanero diferenciado del resto de España. Ahora hay en Canarias una red de 581 tiendas como la que tiene la patronal Asuican: mueve 2.500 millones de euros y produce empleo a 15.300 trabajadores en 434.843 metros cuadrados. Las imágenes de estos días ha forzado a la patronal de las cadenas de supermercados a advertir que tienen almacenada comida en las islas por un año. Ese mes de enero de 1991 visitó Canarias 477.150 turistas. La capacidad aérea regular hacia Canarias en febrero 2020 era de 1.396.918 plazas, cifra similar a de marzo sin el Covid19.

En la Guerra del Golfo hubo otra pesadilla: el abastecimiento de petróleo. Siendo presidente regional Lorenzo Olarte, entonces existía un CDS de matices nacionalistas, debió emplear el teléfono y llamar a Rafael Caldera, presidente de Venezuela, para asegurar a Canarias combustible ante riesgo de problemas de suministro. Una actitud que afeó el jefe de la diplomacia española y excompañero de partido en la UCD, Francisco Fernández Ordóñez, ya entonces en el PSOE. Al igual que en 1991, en las islas hay combustible para 90 días. 

El presidente autonómico Lorenzo Olarte se quejaba mientras los supermercados y tiendas de aceite y vinagre tenían problemas de seguridad: "Estamos a ciegas en cuanto a las previsiones que pueda tener el Estado español respecto a Canarias en caso de conflicto bélico. Por esta razón, a nadie debe extrañar que nosotros queramos, casi por libre, y forzados por las circunstancias, buscar la forma de garantizarnos un suministro de petróleo para el supuesto de que las cosas se pongan feas". Olarte ordenó a su consejero de Industria, Antonio Doreste, que se fuera a Caracas a cerrar el aseguramiento del combustible con PDVSA.

Almacenes llenos en las islas

Pero las cosas han cambiado y mucho. Un portavoz de la patronal canaria de supermercados señaló este jueves que en las islas "los almacenes están a tope, sin problemas. Si esto dura un año, pues sí, pero problemas de suministro ni tenemos ni prevemos que vayamos a tener, pues tampoco hay previstas restricciones en las entradas de mercancías ni en las fábricas", es decir, "la gente puede estar tranquila".

El presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres, ha dicho este jueves que el ejecutivo canario respondió con "contundencia" el 24 de febrero cuando se detectó un positivo por coronavirus en un hotel del sur de Tenerife, y añadió que "menos mal", porque de lo contrario habría muchos más contagios. Ángel Víctor Torres destacó la importancia de ese actuación el 24 de febrero pasado al contener en el hotel a los más de 700 clientes, y señaló que si bien se actúa bien en Canarias será la actualidad la que exija posibles medidas complementarias a las tomadas hasta ahora.

Canarias, subrayó su presidente regional, fue la primera comunidad autónoma en detectar un positivo por coronavirus, el 31 de enero en La Gomera, y la primera que actuar de forma inmediata en un hotel, actuación esta segunda que, afirmó, hizo que hubiera seis personas contagiadas en lugar de cientos. En cuanto a las medidas anunciadas el miércoles como suspender las visitas a centros sanitarios y restringir las que se hagan a hospitales, indicó que la de suspender los actos con más de mil personas no es una recomendación, ya que es una prohibición. Una prohibición que ayuntamientos y cabildos podrán extender a eventos con menos de mil personas, pero comunicándolo a la Consejería de Sanidad.

Insiste en que no se descarta tomar medidas a pesar de que Canarias, destacó, no es una zona de riesgo y se está conteniendo la expansión del coronavirus en el archipiélago. También declaró que ha pedido y seguirá reclamando que la Unión Europea flexibilice la regla del gasto y el objetivo de déficit para que las comunidades autónomas puedan destinar más recursos a servicios esenciales como la sanidad.

WhatsAppFacebookTwitterLinkedinBeloudBluesky