
Afianzar la excelencia de sus operaciones, diversificar hacia nuevas líneas de actividad y aprovechar las oportunidades que ofrece la economía verde. Con estos firmes objetivos afronta su futuro más cercano Ence - Energía y Celulosa, una compañía que tiene en la sostenibilidad y en la diversificación las bases de su modelo de negocio.
Así, el año 2023 se ha iniciado lleno de retos para el grupo, que avanza en todas sus líneas de negocio siguiendo un mismo concepto: impulsar la bioeconomía circular, aprovechando de manera sostenible los recursos naturales, para ofrecer a la sociedad los biomateriales y la bioenergía que demanda.
En su negocio de Celulosa, y tras conocer las sentencias del Tribunal Supremo que avalan la continuidad de la prórroga de la concesión de la biofábrica de Pontevedra hasta el año 2073, Ence ha anunciado un plan inversor de 13 millones de euros anuales durante los próximos diez años en esta instalación, para continuar a la vanguardia del sector de la celulosa en calidad y en sostenibilidad (según avala la agencia de ESG Sustainalytics). La empresa seguirá apostando por la creación de riqueza y empleo sostenibles en Galicia a través de la actividad de esta planta.

En esta misma línea, Ence apuesta por impulsar el negocio de Celulosa a través de su biofábrica de Navia. En la planta asturiana ya se encuentra en marcha el plan Navia Excelente, que contempla inversiones por valor de más de 100 millones de euros, y que reforzará el papel protagonista de estas instalaciones en el avance del Principado hacia la economía del futuro.
En esta biofábrica se ejecutarán diferentes proyectos, centrados en la promoción de los productos diferenciados (comercializados bajo la marca Ence Advanced); en la diversificación hacia celulosa fluff (celulosa especial para productos higiénicos absorbentes); y un novedoso proyecto de descarbonización, que aprovechará todo el potencial de la lignina, material naturalmente presente en la madera, como fuente de energía renovable.

Ence avanza de esta manera hacia un futuro de productos diversificados y diferenciados de celulosa, un mercado en el que ya despunta gracias a la mencionada línea Ence Advanced, desde la que la compañía trabaja en el desarrollo de productos con menor huella ambiental, como alternativa a la celulosa de fibra larga (que requiere un mayor consumo de madera), productos adaptados y especiales, o pasta no blanqueada para la fabricación de bolsas y embalajes de papel que pueden sustituir a materiales como el plástico. Estos productos especiales, entre los que se encuentran celulosas como Naturcell o Powercell, ya suponen un 17% de las ventas totales de celulosa del grupo.
Dentro de ese mismo empeño de innovar y buscar nuevas formas de promover la economía circular, la compañía estudia poner en marcha en la localidad coruñesa de As Pontes una bioplanta para la producción de fibra reciclada blanqueada y biomatriales.
Ya se han iniciado tanto los estudios como la ingeniería para este proyecto, plenamente alineado con la Transición Justa, que se autoabastecerá de energía renovable y cuyo proceso productivo será plenamente sostenible, con un consumo mínimo de recursos naturales, como, por ejemplo, el agua.

Además de reforzar su compromiso con Galicia, esta bioplanta contribuirá a la innovación dentro del sector de la pasta y el papel, al dar lugar a productos capaces de combinar fibra reciclada blanqueada y celulosa producida por Ence, utilizando como materia prima fundamental el papel y el cartón recuperados y, de este modo, sin requerir de nuevas plantaciones ni introducir tensión en un mercado limitado como es el de la madera.
Energía renovable
A través de su filial de renovables, el Grupo Ence continúa impulsando el aprovechamiento sostenible de la biomasa en sus plantas de generación, contribuyendo de esta manera a la descarbonización del mix eléctrico. La biomasa es, además, una fuente de energía renovable gestionable, que no depende de factores meteorológicos como la lluvia o el viento, lo que la convierte en una pieza clave dentro de la transición energética que afronta nuestro país.
Además, el Grupo ha lanzado recientemente una nueva filial que abre, a su vez, una nueva línea de negocio para Ence: la del biogás. Ence Biogas busca específicamente el desarrollo y la operación de plantas de producción de biometano y fertilizantes a partir de residuos orgánicos. Se trata, por tanto, de una nueva línea de actividad basada en la bioeconomía circular que ya sustenta sus dos negocios principales y que presenta un elevado potencial de crecimiento en España.

Ence aprovechará así toda su experiencia y know how en el suministro de madera y biomasa, en la circularidad de los procesos y en la sostenibilidad de sus actividades para aplicarlos en este novedoso ámbito. Ence biogás ya cuenta con una cartera de nueve proyectos en desarrollo en España con una capacidad conjunta para suministrar 560 GWh de biometano al año.
Por otro lado, la gestión forestal que Ence lleva a cabo constituye un importante sumidero de carbono y ofrece nuevas oportunidades de crecimiento en el mercado voluntario de carbono. En este sentido, la compañía ya ha registrado sus primeros proyectos de captación de CO2, que prevé ampliar en los próximos años.
La compañía mira ahora al futuro con decisión y entusiasmo, siendo partícipe y protagonista de la transición de un modelo económico lineal hacia la nueva bioeconomía circular, con una base robusta, asentada sobre la sostenibilidad de sus operaciones, la competitividad en los mercados nacionales e internacionales, y una gestión eficaz, que le permite afrontar con un sólido balance las oportunidades que surgirán en la economía verde.
REALIZADO POR ECOBRANDS
Este contenido ha sido elaborado por EcoBrands, unidad Branded Content de elEconomista.es para Ence.