
La misión diplomática permanente más antigua del mundo es la de España en el Vaticano. El 21 de diciembre de 1622, hace 400 años, el Duque de Alburquerque se instaló en el Palacio de España ante los Estados Pontificios para ejercer como embajador en Roma. Fue la primera embajada permanente de un país extranjero en esta ciudad y desde entonces ha permanecido como la sede de la representación de nuestro país ante la Sante Sede.
Aprovechando el valor simbólico de esta fecha, hace unos días se conmemoró su centenaria efeméride con la inauguración de una nueva iluminación artística en las fachadas del edificio de la Embajada, el más emblemático de toda nuestra red diplomática. El encendido coronó toda un año de actos conmemorativos por el cuarto centenario del Palacio de España como sede de la embajada española.

En una ciudad y un entorno tan emblemático, se hace necesaria una iluminación dinámica para resaltar la belleza arquitectónica de las cuatro fachadas de estilo barroco del Palacio de España. Además del criterio estético se ha priorizado la sostenibilidad a través de la innovación, sello distintivo de la Fundación Endesa en este tipo de proyectos:, con la nueva iluminación se ha logrado reducir un 36% la potencia necesaria para las fuentes de luz instaladas anteriormente. La renovación de las luminarias, por unas más versátiles y eficientes, permitirá un ahorro de 1.752 kilovatios-hora al año, evitando así la emisión de más de 350kg de CO2.
Pero esta no es la única iniciativa que la Fundación Endesa ha llevado a cabo en la capital italiana. Ya en 2007 había colaborado con la iluminación de la fachada principal de esta misma Embajada y, en 2018, la Fundación inauguró la iluminación artística de la Basílica Papal de Santa María la Mayor. Proyectos que se suman a los cientos de planes de iluminación que la Fundación tiene en España y que forman parte de los objetivos de Endesa para promover la conservación del patrimonio.
La luz del patrimonio español
La Fundación Endesa lleva 25 años iluminando el patrimonio artístico español, desde monumentos y edificios destacados como museos a obras de arte en grandes pinacotecas como el Museo Reina Sofía y el Museo Sorolla, en Madrid, el Museo Picasso en Málaga o el MNAC de Barcelona. Multitud de joyas históricas, religiosas o artísticas -más de 700 desde 1998- han formado parte de los proyectos de iluminación de su Fundación, repartidos por todo el territorio nacional. Entre ellos, la Catedral de Palma de Mallorca, la Sala Capitular en la Catedral de Toledo, el Puente Romano de Mérida, la Ciudad Califal de Medina Azahara en Córdoba o la estrella de la Torre de la Virgen María de la Sagrada Familia.
También cabe resaltar, uno de los más recientes y peculiares proyectos de la Fundación, la experiencia nocturna Stella, que nos desvela todos los secretos de la Catedral de Burgos. Se trata de un novedoso concepto narrativo a través de un recorrido nocturno por cinco de las estancias más valiosas de la Catedral de Santa María. En ellas el visitante puede atender a un espectáculo audiovisual de luces, colores y efectos visuales acompañados de una banda sonora concebida para hacer un repaso por toda la historia del templo.
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