Branded Content

Cómo aprovechar el gran boom del empleo en energías verdes

  • Ofrecido por Iberdrola
  • El programa europeo Reskilling for Employment busca la recapacitación profesional para 5 millones de profesionales en 2030

"En Europa hay millones de personas que no encuentran empleo mientras muchas empresas ofrecen puestos de trabajo que no se llegan a cubrir". Son las palabras de Blanca Urtasun, portavoz de Talento Global de Iberdrola y que reflejan la realidad que está atravesando el mercado laboral: Solo en Europa hay más de 5 millones de vacantes sin cubrir, a pesar de haber 11 millones de personas desempleadas desde hace más de 6 meses, principalmente, como consecuencia de la obsolescencia de habilidades.

Uno de los sectores en los que existe esa brecha es de las energías renovables. Según el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima, las inversiones en renovables generarán entre 107.000 y 135.000 empleos al año, mientras que aquellas destinadas al ahorro y la eficiencia energética crearían entre 56.000 y 100.000 empleos al año.

En este contexto, Iberdrola, junto con otras empresas como AstraZeneca, Nestlé, SAP, Sonae, Telefónica y Grupo Volvo colideran el programa europeo Reskilling for Employment (R4E) con el objetivo de impulsar la formación y la búsqueda de soluciones estructurales contra el desempleo en el continente.

"En menos de 30 años debemos pasar de un mundo todavía muy dependiente de los combustibles fósiles a tener cero emisiones netas. La próxima década será decisiva para conseguirlo, siendo necesarios la innovación y el talento, dos valores fundamentales en nuestra compañía", explica Ignacio Galán, presidente de Iberdrola, quien, además, recuerda que "tan solo en los próximos dos años será necesario formar a 15.000 personas a través de programas de recualificación en empleos verdes, creando empleos de alta calidad para conseguir un sistema energético más limpio e inteligente".

En este sentido, la compañía ha detectado cinco perfiles claves: instalador y mantenimiento de parques eólicos, instalador de plantas fotovoltaicas, instalador de infraestructura de recarga de vehículo eléctrico, instalador de sistemas de autoconsumo fotovoltaico y técnico de electrificación de calor.

La meta pasa por capacitar profesionalmente a más de 500 personas en dos años. De momento, se han impartido en Andalucía seis cursos, con una duración media de 13 semanas y más de 400 horas de formación, que buscan combinar la capacitación técnica, el aprendizaje de habilidades y la realización de prácticas en empresas para contribuir a la inserción laboral.

Uno de los participantes ha sido Miguel Ángel Sánchez Baeza, que se formó para ser técnico de electricidad y electrónica cuando era joven. Sin embargo, la vida le llevó a estar más de 20 años en el sector de la hostelería. Se quedó en paro a raíz de la pandemia y ha querido dar un giro a su vida y volver a lo que le apasionaba de joven para poder también escapar de trabajos precarios. Otro ejemplo es el de Trinidad del Rocío. Con 47 años, dos hijos y "demasiados trabajos en la mochila", empezó a estudiar chino, pero ha terminado aprendiendo a montar paneles solares fotovoltaicos: "Me siento realizada".

Para Cristina Tabuenca, responsable de Alianzas de la Fundación Generation Spain, que colabora con Iberdrola, "el objetivo de estos cursos es sobre todo la empleabilidad de los alumnos". De hecho, el 100% de los alumnos encuentra trabajo cuando termina esta formación.

Promovido por la European Roundtable of Industry (ERT), la iniciativa persigue la recapacitación profesional y la generación de nuevos empleos para 5 millones de profesionales en 2030. Está ya en marcha en Portugal, España y Suecia y se está ya preparando su lanzamiento en otros países de la Unión Europea.

Cuenta con un modelo integral y opera a través de cuatro mecanismos: Capacitación tecnológica para la reconversión profesional, incluyendo una plataforma común y recomendaciones impulsadas por inteligencia artificial; una red de proveedores de formación seleccionados de alta calidad y empresas ofertantes de empleo; la creación de ecosistemas de empleo en ciudades para casar oferta y demanda de empleo; y el diseño de sistemas de financiación para ajustar los incentivos a proveedores de formación, empresas y candidatos.

Como subraya Paulo Azevedo, presidente de la Comisión de Empleo, Competencias e Impacto de la ERT, "el objetivo de R4E es sencillo: ayudar a las personas a reciclarse para conseguir trabajos más demandados, mejorando así su calidad de vida".

REALIZADO POR ECOBRANDS

Este contenido ha sido elaborado por EcoBrands, unidad Branded Content de elEconomista.es.

WhatsAppFacebookTwitterLinkedinBeloudBluesky