El banco alemán se ha asegurado el respaldo de Qatar que se ha comprometido a aumentar su participación, que actualmente se sitúa en el 6% y que supone ser segundo máximo accionista por detrás del conglomerado chino HNA. El rumor suele ser recurrente cuando se especula con la salida del conglomerado chino del capital. Esta vez se produce en pleno despegue de la acción desde mínimos. En lo que va de año, las acciones suben un 20% sobre los 8 euros.
Es probable que la inversión se realice a través de Qatar Investment Authority (QIA), el fondo soberano del país, según avanza Bloomberg. El país árabe ya controla una participación importante desde los vehículos de inversión de la familia real del país.
El momento y el tamaño de la inversión no están claros, pero se produce cuando Berlín intenta solucionar los problemas del gigante bancario con una fusión con Commerzbank.
Deutsche Bank ha estado tratando de recuperar el equilibrio después de años de reestructuración tras la crisis financiera mundial. Antes de la crisis las acciones del banco valían más de 90 euros. Pero en los dos últimos años se ha alejado de los 20 euros y cada vez hay más dudas de la supervivencia del que fuera el banco más grande de Europa.
Durante los últimos ejercicios se ha enfrentado a un calvario legal por estar inmerso en todos los escándalos financieros relacionados con la crisis: manipulación de índices y venta de activos tóxicos. Actualmente, está siendo investigado por blanqueo de dinero en EEUU al estar vinculado a la trama de Danske Bank.
Sheikh Mohammed bin Abdulrahman Al Thani, presidente del fondo soberano, afirmó hace unos día que Deutsche Bank se encuentra entre las principales empresas alemanas con las que se mantiene contacto para invertir. QIA maneja 320.000 millones y tiene importantes participaciones en Volkswagen o energéticas como Rosneft.
