
Orange Bank, la actividad bancaria del grupo francés de telecomunicaciones, iniciará su negocio en España en 2019 y la empresa espera que sea rentable al cabo de cuatro años, en un plazo menor que en Francia donde está en funcionamiento desde hace once meses.
Este es el diagnóstico del responsable de los servicios financieros de Orange, Paul de Leusse, que en una entrevista publicada hoy por "Le Monde" explica que en Francia mantienen sus previsiones de "alcanzar el equilibrio en seis años, es decir en 2022, y conquistar dos millones de clientes en diez años".
Pero en España -añade- se espera llegar al umbral de rentabilidad en cuatro años, "más rápido que en Francia porque el modelo es más equilibrado entre el pago y el crédito al consumo, que da más beneficios".
De Leusse detalla el calendario del despliegue internacional de la oferta bancaria de Orange, que pasa por lanzar este año un servicio de pago y de crédito en Rumanía, a lo que seguirá en 2019 la apertura de Orange Bank en España, en Costa de Marfil y en Senegal.
Al año siguiente, pretende instalarse en Eslovaquia, en Mali y en Burkina Faso. Y en 2021 en Bélgica, en Polonia y "en otros países de África".
El pasado febrero, la compañía avanzó que la filial española del banco móvil se iba a constituir en la segunda mitad de este año, para empezar a operar a finales de 2019.
El responsable de los servicios financieros reconoce que se plantearon operar en otros países europeos a partir de su estructura en Francia, pero al final han considerado que "para Orange es necesario tener equipos locales".
En primer lugar para conocer las peculiaridades de cada mercado, y para que las autoridades de regulación tengan un interlocutor directo, pero también por el "deber" de pagar impuestos donde está el negocio y de "crear empleos".
En términos generales, el operador de telecomunicaciones tiene intención de ofrecer servicios financieros en todos los países donde está presente.
En África, su oferta de pago Orange Money cuanta con 40 millones de clientes y ha empezado a distribuir allí "microcréditos y microproductos de ahorro".
De Leusse indica que en el último trimestre en Francia han ido ganando "entre 15.000 y 20.000 clientes al mes", y que el 60% de las aperturas de cuentas se llevan a cabo en las tiendas de Orange.