Madrid
CaixaBank e Ibercaja son las entidades que más cuentas de depósitos (entre las que se incluyen las cuentas corrientes, de ahorro y a plazo) captaron el año pasado sin necesidad de recurrir a las compras ni las fusiones. El banco que preside Jordi Gual captó en 2017 un total de 520.000 cuentas, engordando un 3,7% su cartera hasta los 14,57 millones de cuentas. Por su parte, Ibercaja, incrementó un 7,35% el número de cuentas hasta los 2,19 millones, al sumar 150.000 nuevas, según el Anuario Estadístico publicado ayer por la Confederación Española de Cajas de Ahorro (Ceca).
CaixaBank es la única entidad con gran exposición en Cataluña que no ha sufrido una merma en la captación de cuentas, como les ha ocurrido a BBVA y Sabadell. El banco azul, que tiene una cuota de mercado de en torno al 25% en la región tras comprar Catalunya Caixa y Unnim durante la crisis, perdió 380.000 cuentas el año pasado (un 3,46%), situándose en 10,63 millones de cuentas, mientras que Sabadell se dejó otras 58.000 cuentas (el 0,93%), hasta quedarse con 6,22 millones.
No obstante, los dos grandes aumentos en el número de cuentas vividos durante el ejercicio pasado los protagonizaron Santander y Bankia, aunque cabe destacar que el primero compró el Popular y el segundo, absorbió BMN. El banco que lidera Ana Botín incrementó un 15,7% el número de cuentas hasta los 8,13 millones. La entidad achaca el aumento al éxito del lanzamiento de la cuenta Smart Red, un producto que sacó a mediados del año pasado destinado a los más jóvenes, al buen funcionamiento de la Cuenta 1,2,3 y, en menor medida, a un trasvase de los clientes del Popular. Bankia disparó un 18,86% el número de cuentas hasta los 7,75 millones tras la fusión con BMN. Concretamente, la entidad que preside José Ignacio Goirigolzarri ganó 1,23 millones de nuevas cuentas, dato equivalente al 1,35 millones de cuentas que tenía BMN a cierre de 2016.
Entre las entidades que tienen buen ritmo en la captación de nuevas cuentas destacan Bankinter, que elevó el número un 5,35% hasta las 945.000, y Abanca, que incrementó 100.000 nuevas cuentas, un 4.06% más, hasta situarlas en los 2,56 millones.
Liberbank es, junto a Popular, el banco que más cuentas perdió, un 27,03%, hasta reducirlas a 1,08 millones. La entidad vivió un año convulso tras verse contagiada en el mercado por la caída del Popular y sufrir ataques especulativos. La situación llevó a la CNMV a suspender su cotización el pasado verano, periodo que el banco aprovechó para vender activos inmobiliarios por 600 millones y ampliar capital por 500 millones para sanearse.
BBVA y CaixaBank fueron las entidades bancarias que prescindieron de más trabajadores en 2017
Las principales entidades españolas destruyeron 3.132 empleos el año pasado, lo que supone el 2,2% de la plantilla. BBVA y CaixaBank fueron los bancos que prescindieron de más trabajadores, con 903 y 871 empleados menos, respectivamente. Así, la primera entidad recortó su plantilla un 3,28%, y la segunda, un 2,91%. Por volumen, fue Liberbank la entidad que más trabajo recortó y ajustó el 13,33% de su plantilla, hasta quedarse con 2.303 empleados, lo que se traduce en un recorte de 354 trabajadores. Kutxabank redujo su fuerza laboral en 234 trabajadores, el 5,72% del total, hasta situarlos en 3.858. El empleo continuará recortándose este año en la banca tras las últimas fusiones.
35.034 cajeros
Las doce principales entidades del país tenían a cierre de 2017 un total de 35.034 cajeros, 1.012 menos que un año antes, o lo que es lo mismo, un 2,81% menos. Sabadell recortó hasta el 15% de su parque de cajeros (541) y CaixaBank, el 11% (1.047). Por su parte, Bankia los incrementó un 15,6% (en 806) tras la fusión con BMN. Respecto a las oficinas, las entidades que más sucursales cerraron fueron BBVA, que se deshizo del 4,4%, es decir, 375; Sabadell, que cerró 294, el 10,69% de los que tenía; y CaixaBank, que recortó 209, el 4,03%.
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