
Santander cargó ayer contra el exceso de regulación y contra la carga cada vez más exigente de capital en el sector financiero que los reguladores están impulsando tras el estallido de la crisis. El director de relación con los supervisores del grupo cántabro, José Manuel Campa, aprovechó unas jornadas de PwC sobre la Unión Bancaria para criticar con dureza las reglas impuestas desde la caída de Lehman.
El exsecretario de Estado de Economía consideró que desde entonces esta recapitalización no ha ido acompañada de un aumento del crédito. En este sentido aconsejó que se castigue a aquellos bancos que cuentan con un colchón de solvencia muy por encima de los requerimientos que no incrementen su saldo de préstamos, en vez de penalizar a aquellos que conceden financiación sin tener unos ratios de capital demasiado elevados.
Campa se refirió a la normativa de Basilea III, pactada en 2010 por los países del G20, en la que participó como miembro del Gobierno socialista, y la regulación que entrará próximamente en vigor, conocida como MREL para las entidades europeas y como TLAC para los grupos sistémicos a nivel internacional. Esta última elevará el capital y los instrumentos que asumen pérdidas del sistema al 16% sobre los activos en riesgo como mínimo.
El directivo del Santander reclamó que ésta última se tendría que tener en cuenta los perfiles de riesgo de cada banco. Sobre este aspecto, y en concreto sobre la autonomía de las filiales, avanzó que en el nuevo marco no se va a reconocer esta independencia, por lo que "no es una buena noticia para la banca española".
En el acto, PwC presentó un informe, en el que se apunta como uno de los principales retos para el sector la falta de rentabilidad en una época de escasa actividad y de tipos de interés bajos.
Este desafío también fue apuntado por el subgobernador del Banco de España, Fernando Restoy, en las mismas jornadas. Ante esta coyuntura el número dos del organismo supervisor insistió en la necesidad de que haya nuevas fusiones en nuestro país y en Europa, pero reclamó que éstas se materialicen de una manera ordenada, al igual que los ajustes de personal.