El consejero delegado de Banco Sabadell, Jaume Guardiola, ha insistido en que su entidad no va a comprar Catalunya Banc porque considera que ya ha hecho "muchas adquisiciones" durante la crisis, y ha sostenido que los clientes saldrían ganando si fuese un inversor o un banco extranjero como el Deutsche Bank -entre otros- el que se hiciera con el control del banco nacionalizado.
"Si acaba en manos de alguna entidad que tiene mucha implantación en Cataluña, esto comportaría necesariamente muchos cierres de oficinas, y esto reduciría la oferta financiera a la gente de la calle", ha argumentado este miércoles en declaraciones a Catalunya Ràdio recogidas por Europa Press, donde ha mencionado La Caixa, el BBVA y su propio banco como los tres con mayor presencia en la comunidad catalana.
Guardiola ha hecho una defensa del expresidente de Catalunya Banc Adolf Todó y de su equipo, asegurando que fueron "parte de la solución y no del problema" y que se encontraron con una entidad muy hundida y con unas pérdidas latentes enormes.