Barcelona
CriteriaCaixa culmina la reestructuración de su equipo ejecutivo con el nombramiento de José María Méndez como nuevo director general. El holding con sede en Barcelona cesó la pasada semana a Ángel Simón del cargo de consejero delegado y situó a Francisco Reynés como vicepresidente ejecutivo. A la práctica, el primer ejecutivo del grupo. Como el dirigente compaginará su puesto con la presidencia ejecutiva de Naturgy, el grupo apoyará al directivo con el exCEO de Cecabank, que llevará la operativa diaria.
El conglomerado inversor anunció este viernes su decisión. Méndez "se ocupará de la gestión operativa del holding y reportará a su comisión ejecutiva", señaló Criteria en un comunicado.
Para apoyar a Méndez, hasta ahora adjunto al CEO, Criteria nombró a Adolfo Feijóo, hasta ahora director de asesoría jurídica y vicesecretario del consejo, como nuevo director general adjunto.
Entre ambos llevarán la gestión del día a día de Criteria bajo la dirección ejecutiva de Reynés, nombrado la pasada semana como vicepresidente ejecutivo. Sin embargo, el mallorquín no tendrá dedicación exclusiva, al menos en un primer momento, al holding, pues compaginará su puesto con el de CEO y presidente ejecutivo –es la única firma del Ibex que todavía tiene ambas figuras juntas-. Más en un momento con tantos retos para la energética: con la potencial entrada de Taqa en su accionariado.
Los tres deberán proseguir con la ejecución del plan estratégico del grupo, que tiene el objetivo de alcanzar una cartera de 40.000 millones para 2030. El holding barcelonés desembolsó hasta 3.959 millones de euros durante 2024 y ha acelerado en el primer trimestre de esta campaña. La inversión total desde el lanzamiento de la nueva hoja de ruta ronda los 5.500 millones de euros.
El adiós de Simón
El nombramiento de Méndez y Reynés y el ascenso de Feijóo culminan la reestructuración del equipo ejecutivo de Criteria; una sucesión abrupta tras el cese de Ángel Simón la pasada semana. El antiguo ejecutivo de Agbar abandonó su cargo de consejero delegado tras un distanciamiento con Isidre Fainé, presidente de Criteria y de la Fundació La Caixa, agudizado en las últimas semanas tras el cese de José María Álvarez Pallete de Telefónica.
La excesiva agenda propia y vinculación con el Ejecutivo socialista y el intento de adquirir el 20% de la siderúrgica Celsa –una empresa que no da dividendos- fueron otros de los motivos que motivaron la salida del primer ejecutivo.
