
Correos ya ha elegido con quién trabajará en el mundo de los seguros en los próximos años. Será con la francesa Axa, tras el anuncio de la compañía pública desvelado hoy, por lo que Mapfre y Caser son las otras damnificadas en este proceso.
Hasta ahora, Correos se limitaba a promocionar los seguros de estas tres compañías y no venderlos, pero con el anuncio de su plan estratégico, los planes pasaban por una transformación de la sociedad y transformarla en un agente de seguros exclusivo.
Es decir, antes del 11 de diciembre, cuando se publicó en el Boletín Oficial del Registro Mercantil (Borme), Correos solo podía sugerir a los clientes estos productos, haciendo publicidad, pero la gestión de la póliza corría a cargo de la compañía.
El acuerdo no desvela cuántos años durará esta alianza, si bien el plan estratégico está enfocado hasta 2028. Las pólizas que comercializará la empresa de paquetería y mensajería serán de automóviles, hogar, salud, vida riesgo y accidentes para particulares.
El acuerdo alcanzado tras un proceso de concurrencia competitiva, fue rubricado por Pedro Saura, presidente de Correos, y por Olga Sánchez, consejera delegada de Axa.
Los seguros es un negocio que Correos busca potenciar en estos cuatro años y lo consideran como "un pilar de negocio para la generación de ingresos". Además de reforzar el foco principal de la compañía, el sector postal tradicional, también busca "dar un impulso a la paquetería", así como "diversificar los ingresos a través de negocios financieros", donde entran en juego los seguros.
Correos viene de unos ejercicios muy complicados, donde han registrado pérdidas de hasta 1.000 millones de euros, acumulando una deuda que ha dejado a la empresa al borde de la quiebra. Por ello han tomado también medidas drásticas, como planear la salida de 8.000 trabajadores de 61 años o más de forma incentivada.