El brazo portugués del gigante bancario español Santander dejaría la puerta abierta a una posible adquisición de su rival Novo Banco, dependiendo del precio, dijo el martes el consejero delegado de Santander Totta. En septiembre, tres fuentes con conocimiento del asunto dijeron a Reuters que el propietario de Novo Banco, la firma de capital riesgo estadounidense Lone Star, podría seguir adelante con una venta, así como con una salida a bolsa del cuarto mayor banco de Portugal.
A la pregunta de si Santander Totta estaba interesado en adquirir Novo Banco, el consejero delegado Pedro Castro Almeida dijo que su banco podría tener que mirar más allá del crecimiento orgánico, que se ha vuelto muy limitado en el maduro mercado bancario portugués. "Es una cuestión de oportunidad y de precio. Así que estamos aquí para estudiar todas las oportunidades", declaró Castro Almeida en una conferencia.
Los cinco principales bancos portugueses, entre los que también figuran la estatal Caixa Geral de Depositos (CGD), Millennium bcp y Banco BPI, controlado por Caixabank, controlan más del 80% de los activos bancarios del país, pero los analistas ven margen para una mayor consolidación como medio de mejorar la competitividad.
Novo Banco se creó en 2014 a partir del rescate por parte del Gobierno portugués del banco privado en quiebra Banco Espirito Santo (BES). Desde 2017 es propiedad de Lone Star en un 75%, mientras que el fondo de resolución portugués y el Estado poseen el resto.
Tras años de frenazo, las adquisiciones en el sector bancario se están reactivando en Europa, como demuestran la opa del BBVA sobre Sabadell y la de UniCredit sobre su rival italiano BPM, lanzada esta misma semana.