Banca y finanzas

Bruselas recuerda a Scholz que no puede frenar la compra de Commerzbank por UniCredit por motivos económicos

  • El canciller alemán tildó la operación de "hostil"
  • El banco italiano habría alcanzado una participación superior a la del Estado alemán en la entidad germana
Vista del exterior de la Comisión Europea.
Bruselasicon-related

El movimiento del banco italiano Unicredit para ampliar su participación en la entidad alemana Commerzbank hasta el 21% ha desatado el rechazo del Gobierno alemán. El Ejecutivo de Olaf Scholz advertía de que las adquisiciones hostiles no son buenas para los bancos. Sin embargo, la Comisión Europea recuerda a Berlín que las reglas del juego son distintas: la normativa comunitaria no permite restringir la libertad de empresa por motivos económicos.

El Ejecutivo comunitario, reacio a posicionarse en el tema, ha explicado que, de forma general "solo se permiten restricciones a las libertades fundamentales si son proporcionadas y se basan en el interés legítimo". La portavoz comunitaria, Veerle Nuyts ha puntualizado en rueda de prensa este martes que "estas restricciones no pueden ser justificadas puramente por razones económicas", sino que es necesario que se resida su justificación en los tratados o en motivos de relevancia que un tribunal determine de interés general.

Desde Nueva York reaccionaba el canciller alemán que consideraba que "los ataques no amistosos y las adquisiciones hostiles no son algo bueno para los bancos". Fue así como manifestó el rechazo del Ejecutivo alemán a la operación: "no consideramos que sea una actuación adecuada".

Se alineaba con tal posicionamiento la oposición. El líder de la CDU tildó el movimiento de UniCredit de "amateur" y advirtió de que la operación sería "un desastre para el mercado bancario alemán.

El lunes el banco italiano capitaneado por Andrea Orcel anunciaba que había alcanzado una participación del 21% en capital de Commerzbank, aunque "la liquidación física de los nuevos instrumentos financieros solo podrá producirse una vez obtenidas las autorizaciones necesarias", decía el comunicado de prensa. Pero las pretensiones de UniCredit van más allá, pues ha pedido autorización a reguladores nacionales y europeos para llegar al 29,9% de la participación sobre la entidad.

Con esta operación, el banco italiano se convertiría no sólo en el principal inversor de la entidad germana, sino que rebasaría la participación del Estado alemán, que ostenta casi el 10% del capital. Si la idea del Estado alemán era salir del capital de Commerzbank hace un mes, para desprenderse de la participación que había comprado en la crisis de 2008, hace tan solo una semana anunciaba que frenaría la venta de acciones en un intento por evitar que UniCredit se hiciera con una participación mayor.

El ministro alemán de Finanzas, Christian Linder, confirmó este martes que compete a Commerzbank evitar una adquisición por parte de UniCredit, pese a que el Gobierno paralizó la venta de acciones ante la inquietud de los accionistas. El alemán se mostró crítico con la actuación de UniCredit "el estilo del acercamiento de UniCredit ha inquietado a muchos accionistas", ha afirmado. "El Estado no puede ser accionista a largo plazo de una institución competidora".

WhatsAppFacebookTwitterLinkedinBeloudBluesky