
El CEO de UniCredit, Andrea Orcel, deja la puerta abierta a una posible compra sobre el Commerzbank. Así lo comentó ayer el directivo en una entrevista para Bloomberg, en la que afirmó que esta operación "crearía algo más grande que el Commerzbank en solitario".
Además, la operación no cuenta con la negativa del Banco Central Europeo (BCE). Su presidenta, Christine Lagarde, no quiso mostrarse ni a favor ni en contra de la fusión, pero la posición del BCE a crear entidades financieras más grandes para poder competir con compañías fuera del continente es clara. De ahí que Lagarde puso en boca de "las autoridades" que esta operación es "esperada por el sector, que reclama una mayor integración con fusiones transfronterizas".
Lo cierto es que UniCredit necesita el permiso del BCE para aumentar la participación sobre el banco alemán. De momento Orcel ya ha solicitado al regulador europeo crecer en participación hasta el 9,9%.
Esta fusión crearía el primer megabanco europeo, aunque la unión entre ambas entidades dejaría a la nueva sociedad como la quinta más importante del continente, por detrás de, por ejemplo Banco Santander, aunque justo por encima de Deutsche Bank.
Los obstáculos
Aún no se conoce la estrategia que seguirá UniCredit para intentar que la operación llegue a buen puerto, pero de momento la irrupción sobre Commerzbank sigue patrones similares a la que ya hizo con Alpha Bank, al comprarle un 9% al Estado griego.
Pero el primero de los obstáculos que aquí se encontraría la entidad italiana pasa justamente por Deutsche Bank. La posibilidad de perder el liderato en el país puede hacer que se reactive la opción de compra de hace cinco años.
Otro impedimento pasaría por el Gobierno alemán, que sigue siendo el mayor accionista de Commerzbank con una participación del 12%, y que podría exigir que se mantenga una cotización en el país, así como su propio consejo de supervisión nacional.
UniCredit también debería enfrentarse a los poderosos sindicatos alemanes ante los potenciales despidos y un traslado de poder de Frankfurt a Milán. "Lucharemos con uñas y dientes contra esta operación", dijo Stefan Wittmann, alto cargo del sindicato de servicios alemán y miembro del consejo de supervisión de Commerzbank.
Y por último, sus propios accionistas, que han disfrutado de ganancias del 230% en los últimos tres años. Y es que, UniCredit se ha comprometido a devolver 8.600 millones (la totalidad de sus beneficios de 2023) a los inversores en forma de recompras de acciones y dividendos. En este sentido, Orcel ha dicho que sólo buscará una transacción si cumple ciertas condiciones, incluida una rentabilidad de la inversión del 15%.