La tensión entre los sindicatos de BBVA y su dirección escala ante su renuencia a topar los intereses de las hipotecas a la plantilla. CCOO, UGT, CGT, ELA, SEC, CIG, Intersindical y ACB han decidido "romper la interlocución con el banco" en las diferentes comisiones o grupos de trabajo como primer aviso de presión, sin descartar acciones de protesta superiores de no variar la posición del banco, explican fuentes sindicales.
"Para BBVA solo somos 7.000 personas con hipotecas por 1,4 millones de euros de capital pendiente a los que no se nos ha repercutido nada cuando el euríbor era negativo y a los que ahora nos toca apechugar, aunque nuestro único sueldo dependa del banco. Somos tan sólo un coste", exponen en un comunicado conjunto.
A finales del pasado año, la entidad financiera aceptó facilitar a la plantilla la conversión de las hipotecas variables a fijas para ayudarles a compensar el rally del euríbor, con un interés de alrededor del 3,1% (el euríbor de entonces más un 0,25%), pero la representación sindical reclama dar un paso más y fijar un tope inferior como otras entidades.
En particular, apuntan al Santander, que ha limitado el interés en 1,5% durante doce meses, y CaixaBank, cuyos préstamos de la plantilla se encuentran ligados al euríbor menos un 2,5%, y señalan que hay también soluciones similares en Banca March o Sabadell. "Son condiciones que aplican a los clientes, tratan mejor al cliente que a la propia plantilla", critican las fuentes sindicales.
Facilitó pasar de variable a fijo
Además, denuncian que el banco solo acepta al empleado bajar el plazo de la hipoteca cuando realiza amortizaciones anticipadas, "sin posibilidad de reducir la cuota" que es lo que "deseas reducir cuando estás asfixiado con la cuota". "Somos clientes cautivos", exponen otras fuentes sindicales, ante la dificultad de mover la hipoteca a otra entidad financiera que no sea la suya.