Santalucía da nuevos pasos en Portugal. La sociedad Serfun Portugal, que participa junto a su socio Fidelidade, ha comprado el 75% de la funeraria lusa Pax-Júlia por 1,8 millones de euros. Para Santalucía, la inversión responde a una oportunidad puntual y es parte de la cartera de inversiones más amplia del grupo. Pax-Júlia es una empresa pequeña, pero encaja a la perfección en su estrategia de invertir en activos cuyo negocio intrínseco conoce bien, para poder acompañar mejor su evolución y asegurar los retornos sobre la inversión, y resulta complementaria en la alianza con Fidelidade.
En Portugal fue donde firmó, precisamente, la primera operación internacional en Europa con un acuerdo de colaboración en el año 2016 con Fidelidade, la mayor aseguradora del país, y con la que persigue desarrollar los seguros de decesos. Y la pata de servicios funerarios la operaría a través de Pax-Júlia.
Santalucía llevaba tiempo buscando dar el salto a Portugal y en 2014, apenas dos años antes, estuvo, incluso en conversaciones con Banco Espirito Santo para comprar su aseguradora Tranquilidade, que finalmente se adjudicó Apollo.
En estrategia de internacionalización, la compañía está atenta a operaciones que puedan encajar en sus objetivos, cultura y estrategia de negocio, con una apuesta por alianzas o acuerdos que permitan exportar su modelo de negocio.
El primer salto al exterior para Santalucía tuvo lugar en 2011 en Argentina, donde comercializa también seguros de decesos, y entró con la compra de la compañía FDF. En Chile ofrece este tipo de pólizas a través de Bice Vida, en Colombia mediante el Grupo Prever gracias al acuerdo con el Grupo Fundación Social y en México opera servicios residenciales para personas mayores en alianza con el Grupo Presidente y a través de su filial Ballesol. En este último mercado también presta servicios funerarios con Aeternitas Memorial.
La vocación del grupo en materia de internacionalización es seguir creciendo en los mercados en los que donde está presente, incluyendo México y Chile, en los que su posición es aún incipiente, y ampliar exposición a otros países del continente europeo.
El negocio funerario es el germen de Santalucía, aunque el grupo ha ido diversificando la actividad y geografía en los últimos años, añadiendo nuevos seguros a la cartera de productos y con una apuesta decidida por otros negocios como las residencias para mayores.
En decesos ocupa una posición líder en España a través de Albia, que surge en 1998 de la fusión de varias funerarias nacionales y en 2000 inició una expansión por toda la geografía nacional para dar después el salto también a Argentina, y continúa añadiendo piezas. Entre las últimas inversiones figura la compra el pasado año de World Funeral Net (WFN), una plataforma digital de servicios y traslados funerarios que le permite tramitar servicios en cualquier punto del planeta gracias a una red capilar global, y la adquisición del negocio funerario más importante de las Islas Canarias.
