
El presidente de CaixaBank, José Ignacio Goirigolzarri, lanzó el miércoles varios mensajes de tranquilidad sobre la capacidad y vocación de la banca para ayudar en los actuales momentos y una advertencia: tiene que ser rentable para ejercer su cometido. En un encuentro con 2.000 ejecutivos organizado por la APD garantizó que el sector bancario "cuenta hoy con el músculo financiero necesario para estar muy cerca de empresas y familias" y poder, de esta forma, "contribuir a la recuperación socioeconómica de nuestro país".
El banquero defendió el interés de las entides financieras por contribuir al desarrollo de la economía y el bienestar de los ciudadanos, avisando que, para ello, es necesario que tengan una rentabilidad superior a su coste de capital. Un mensaje que llega cuando el Banco de España y el Banco Central Europeo (BCE) demanda al sector ser prudente y acopiar provisiones y capital frente a los potenciales deterioros que se derivarán del contexto de freno económico con la inflación y tipos de interés al alza, y cuando el Gobierno va a penalizar las cuentas de los bancos con el nuevo impuesto del 4,8% a los ingresos.
Goirigolzarri expuso que la realidad del sector es "muy distinta a los clichés negativos" de la crisis financiera y ha remarcado que las pymes españolas se están financiando a tipos inferiores a las alemanas, recordando que el papel de la banca se puso de manifiesto "en los días más duros de la pandemia". Para entonces, según rememoró, los clientes pudieron realizar su operativa con normalidad gracias a los esfuerzos de las entidades, que además apoyaron a familias y empresas a través de las moratorias hipotecarias y de créditos de consumo o los préstamos con aval del ICO.
Sin embargo, reconoció que el sector se enfrenta a "la necesidad" de transmitir a la sociedad "la utilidad" de su trabajo y "la indudable labor social" que realiza porque "la sostenibilidad de un proyecto, un sector o unas instituciones pasa por que la sociedad lo encuentre útil y quiera que existas". De forma específica apuntó que CaixaBank promueve diversas iniciativas sociales y cuenta con MicroBank, "el mayor banco de microfinanzas de Europa".
En clave macroeconómica, reconoció que el contexto lo domina la incertidumbre, pero aseguró que no ve "razones" para esperar que en España se produzca "un fuerte deterioro" del nivel del Producto Interior Bruto (PIB), y que tampoco se está viendo hasta ahora "ningún deterioro en los niveles de impago de las familias ni de las empresas".
CaixaBank espera un crecimiento del PIB entre el 0% y el 1% en el año 2023, y a una inflación, en términos medios, de 4,5% al 6%. "El papel de la política monetaria va a ser clave en este equilibrio entre inflación y crecimiento del PIB", avisó e indicó que la previsión es hoy que el euríbor a 12 meses llegue al 3,1% a mediados del próximo año.