
Banco Sabadell está doblemente expuesto a la carrera que han emprendido los bancos centrales para dar caza a la inflación. Si en la zona euro se espera que el precio del dinero se sitúe en el 2% a cierre de año y en el 2,5% en el primer trimestre de 2023, el Banco de Inglaterra podría llevarlo al 2,75% para diciembre, según cálculos de Bank of America, y llegar al 4% el próximo año. Este contexto llevará a su filial británica, TSB, a elevar su peso en los resultados del grupo hasta suponer una cuarta parte del beneficio neto en 2023 cuando fue en 2021 cuando logró volver a ser rentable, a pesar de unos mayores costes de eficiencia que todavía arrastra de su pasado en Lloyd's.
TSB aportó 118 millones de euros al resultado neto del grupo el año pasado y se espera que este se incremente en un 44% hasta 2023, cuando obtendría un beneficio de 170 millones, algo más del 26% de los 640 millones que se esperan para el grupo. Y su ritmo de crecimiento duplicará al de la matriz en España, ya que las ganancias netas serán un 21% superiores en dos años, según estimaciones recogidas por Bloomberg. A cierre del primer semestre, Sabadell obtuvo de Reino Unido el 13,7% del beneficio neto, 54 millones de euros, aunque llegó a ser el 20% en 2021.
Cartera hipotecaria
Una de las claves del crecimiento de los ingresos de TSB es que se trata, básicamente, de una filial hipotecaria. De la cartera de crédito vivo, 41.000 millones de euros, un 93% son préstamos para la compra de una vivienda. Este volumen de créditos representa ya un tercio del total del grupo, con 158.000 millones.
Fuentes del sector financiero, dado el contexto actual, prevén un crecimiento de los préstamos de en torno al 5% en Reino Unido sobre el 0%-3% de España. En la actualidad, el hecho de que el Banco de Inglaterra vaya por delante del BCE en la subida de tipos lleva al margen de clientes de TSB hasta tasas del 2,48% frente al 2,17% del grupo. Y los diferenciales tenderán a aumentar al calor de tipos que se dirigen al 4%.
La cartera hipotecaria de TSB está vinculada en un 83% a tipo fijo con un vencimiento medio de dos a cinco años, frente al 50% de la cartera española. En ello influye la particularidad del mercado británico donde es habitual una elevadísima rotación de clientes que buscan, tras unos años con sus préstamos a tasa fija, la mejor alternativa cuando estos se convierten a variable pasado este primer periodo.
La morosidad de la cartera crediticia de TSB está en el 1,3%, frente al 3,3% de la media del grupo, y se debe, fundamentalmente, a descubiertos o tarjetas de crédito, no a hipotecas. De ahí que las provisiones necesarias sean mucho más bajas y, en conjunto, representan el 7% del total de Banco Sabadell.
La entidad, que no ha hecho pública la sensibilidad de TSB a un alza de tipos, sí ha reconocido que a nivel grupo 100 puntos básicos de subida en la zona euro supone un impacto positivo del 5% el primer año sobre el margen de intereses y del 8% al 12% el segundo año.