
La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha publicado una serie de recomendaciones para facilitar la retirada de dinero en efectivo a los ciudadanos que estén en riesgo de exclusión financiera, especialmente aquellos que viven en zonas rurales o pertenecen a colectivos vulnerables.
El 'Estudio sobre la retirada de efectivo en cajeros automáticos', que ha elaborado a solicitud de la Secretaría de Estado de Economía y Apoyo a la Empresa, la CNMC insta a adoptar un marco legal que impulse fórmulas como el cashback y el cash-in-shop, que permiten retirar efectivo en comercios locales. "Su impulso facilitaría que se extendieran los puntos de acceso al efectivo y la inclusión financiera de quienes no disponen de un cajero automático cercano", explica.
Para explicar los conceptos, el cashback permite que el cliente cuando compra un producto en un comercio y lo paga con su tarjeta bancaria o a través de una aplicación solicite al vendedor que le cobre el precio de compra más una cantidad. Esa cantidad adicional se le devolverá en efectivo y equivale a la retirada que se haría en un cajero. En el caso del cash-in-shop, no es necesario vincular la retira de efectivo a una compra, directamente se solicita la retirada de un importe determinado en el establecimiento.
El apoyo público a sistemas de acceso a efectivo en zonas rurales es otro punto fuerte de las recomendaciones de la CNMC. Recuerda que puede hacerse a través de licitaciones públicas y la concesión de ayudas, que no deben distorsionar la competencia.
Según explica, las medidas públicas para fomentar la instalación de cajeros automáticos y otros sistemas alternativos de acceso al efectivo deben regirse por los principios de regulación económica eficiente y promover la competencia para alcanzar los mejores resultados.
Los cajeros automáticos se han reducido un 23% en los últimos 15 años
La CNMC incluye en el estudio una serie de conclusiones en relación a los problemas a los que se enfrentan las personas más vulnerables en términos de exclusión financiera. En este sentido, destaca la reducción de cajeros, que ha caído un 23% en los últimos 15 años, o la baja implantación de sistemas alternativos, más desarrollados en otros países europeos.
Sobre el acceso que tienen las personas que viven en entornos rurales a la retirada de efectivo, desde la CNMC han mencionado que un 55% de los municipios carece de cajeros automáticos.
La CNMC señala a la digitalización como uno de los motivos por los que cada vez menos personas optan por utilizar el efectivo, reduciéndose el porcentaje de personas que usan este medio del 80% en 2014 al 36% en 2021.