marea de inestabilidad
Con pragmatismo, el Kremlin ha sacado sus conclusiones de los conflictos en Oriente Próximo y Medio. De igual modo ha sacado sus conclusiones de las intervenciones militares de Occidente en los últimos años. Con un pragmatismo realista ha aplicado las lecciones aprendidas en Siria. Nunca consideró la rebelión como una manifestación de la Primavera Árabe y el presagio de un nuevo orden democrático. Lo entendió, desde un comienzo, como parte de una amplia marea de inestabilidad en la región que amenazaba con traspasar las fronteras rusas.