Cuando en marzo Meghan Markle y el príncipe Harry acusaron de racista a la Casa Real Británica en su histórica entrevista con Oprah Winfrey, todas las miradas se centraron en 'encontrar' al royal que se mostró preocupado por el color de piel que tendría su primer hijo, Archie, antes de nacer. Ahora, un libro ha puesto en el centro del huracán al príncipe Carlos.