El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, lleva un par de años presionando por la salida del poder del gobierno de Nicolás Maduro, pero aún en medio de las sanciones que impone, cada vez más alimentos y golosinas llegan a puertos de Venezuela desde grandes tiendas en el estado de Florida. Cajas de Nutella, mantequilla de cacahuete o leche de almendras, productos casi imposibles de encontrar hasta hace un año en la implosión económica de la nación sudamericana, se ofrecen ahora en más de un centenar de tiendas que aceptan pagos en dólares y operan en las principales ciudades del país como una válvula de escape que le reduce presión a la gestión de Maduro.