Esa generación de jóvenes que ha sido bautizada como millennial no solo es coetánea de la crisis económica. También ha madurado en un entorno digital y de redes sociales que han ampliado las oportunidades de negocio, de trabajo o incluso de fama. Youtubers, influencers o gamers son un ejemplo claro que además ganan importantes sumas de dinero. El restringido trabajo como inversor de bolsa también se ha visto afectado por este hecho y ahora beneficiarse de la volatilidad bursátil está al alcance de todos. El denominado social trading es un paso más en esta democratización, uno que se convertirá en "una tendencia muy fuerte en dos años", asegura el day trader Josef Ajram.