El universo de los videojuegos es tan amplio que cualquiera puede formar parte sin tener un gran set-up, aunque conviene contar con algunos elementos básicos. El ordenador gaming es el principal, porque se convertirá en tu herramienta de juego. Y cuanto mayores sean tus prestaciones, mejor será el rendimiento, los reflejos e incluso tus capacidades. Si, además, añades algunos elementos extra, como una silla gaming o unos auriculares, podrás llevar la experiencia al siguiente nivel.