Pensar en Marbella es pensar en lujo, en alocadas fiestas, en descorches por doquier de botellas de champán, en coches de alta gama, lujosos yates y mucho oro. Sin embargo, aquella época de desenfreno de los años 70 y 80 donde se convirtió en el refugio preferido de la jet set, también tuvo sus horas bajas a finales de los 90 cuando ese turismo de excesos abandonó la Costa del Sol dirigiéndose a destinos con menor exposición.

Mucho más allá de los museos y de las ferias, darse una vuelta por las galerías de arte es una buena manera de estar al tanto de las tendencias, disfrutar de las obras e, incluso, pensar en una posible inversión.

Ubicados en la ciudad, en medio de un campo o a dos pasos de la playa, cualquier propuesta es buena para aquellos que buscan la desconexión, un lugar que sea un destino en sí mismo y que lo único que quieras es estar encerrado entre sus muros, pasear por sus jardines y relajarte en sus spas. Aquí te presentamos una selección cuyo único peligro es tener que enfrentarte al síndrome de Sthendal.

Mucho antes de bajar del avión, mientras vas sobrevolando la ciudad antes de aterrizar, el color rojo característico de la ciudad entra por los ojos y ya no te abandonará hasta el final de tu estancia en Marrakech.

Entrar en el estudio de Roberto Torretta es como sumergirte en un remanso de paz dentro de la gran ciudad. Situado en un barrio alejado del centro de Madrid, en una época donde prima la moda rápida y la información a golpe de click, llama la atención entrar en un lugar concebido como un atelier clásico con una showroom donde probar a las clientas y un taller con sus máquinas de coser, patrones y telas.

Con madre de Jerez de la Frontera y de apellido Domecq, desde pequeño Daniel Entrecanales tuvo claro que su vida estaría ligada al mundo del caballo. Lo que primero fue una afición, después lo convirtió en un negocio gracias a la creación de Madrid Horse Week que este año acaba de cumplir su décima edición. Experto en marketing, no en vano es presidente de la agencia de publicidad RK People Group, desde el principio el empresario madrileño quiso quitar el halo elitista que rodea al mundo de la hípica y acercar el evento a todo el mundo llevándolo a IFEMA.Su nueva aventura empresarial son la creación de los hoteles Cristine Bedford, con uno en Mahón y otro en marcha ya en Sevilla. Además es consejero de Prosegur Cash y de Acciona, empresa que preside su hermano José Manuel y que fundó su padre.

Mucho más allá de elaborar vinos de gran calidad sin dejar de lado la tradición, el presidente de las Bodegas Familiares Matarromera ha apostado de lleno por la investigación y la innovación. Diez bodegas de seis denominaciones de origen, una marca cosmética, otra de aceite, propuestas de enoturismo y nuevos retos en el sector alimentarios atestiguan su éxito.

Los nuevos hoteles de la capital eligen el centro de la ciudad para ubicarse, pero además, todos tienen un denominador común: ya no son sitios exclusivamente para ir a dormir, sino que se han convertido en un punto de encuentro entre turistas y madrileños. Coworkings, exposiciones de arte, tiendas de lujo, coctelerías, restaurantes o spas, son algunos de los servicios que ofrecen y ya no solo para el foráneo. Y por supuesto: imprescindible una buena azotea.

Adiós a las villas blancas con jardines y en primera línea de playa. Ahora lo que se impone son grandes apartamentos en la montaña con terrazas con vistas al mar y bajo el diseño de una firma de moda.

No hay duda de que surcar los mares es una de las experiencias más placenteras que existen, pero si a eso le sumas embarcarte en una goleta turca totalmente rehabilitada, con interiores de maderas nobles, amplios espacios, camarotes con baños individuales y una exclusiva cubierta desde donde ver atardecer cada día, dicha experiencia se convierte en insuperable. Y eso es lo que ofrece La Goletta, la nueva embarcación de Beso Beach que, con motivo del décimo aniversario del grupo este año lo que era un velero se ha convertido en una elegante embarcación con todo lujo de detalles para hacer de los días que estés en alta mar, todo un disfrute para los sentidos.