Fundador y primer director general de Turespaña
Pueblos con 8.000 habitantes que ahora apenas llegan a los 1.500

Lo que más impresiona de un viaje por el oeste de la provincia de Zamora es la rapidez con la que ha tenido lugar el despoblamiento de la zona que ha transformado en menos de medio siglo el paisaje, y por supuesto las formas de vida de la población restante. Ya Unamuno había señalado que "nuestros paisajes permanecen en bruto por falta de viajeros que los refinen. España está en gran parte por descubrir", refiriéndose precisamente a esta zona.

Ignacio Vasallo

Este verano de 2017 ha quedado marcado trágicamente por los atentados de Barcelona y Cambrils, pero antes ya habían ocurrido algunos acontecimientos que le han otorgado un carácter muy especial. Por primera vez han tenido lugar manifestaciones contra los excesos del turismo en Barcelona, Palma y San Sebastián, algunas claramente comprensibles, como las de los vecinos de algunos barrios de Barcelona, cuya vida diaria se ha visto transformada para mal y que se han desarrollado de manera pacífica. Otras fueron violentas, como el asalto al Autobús Turistic o los pinchazos de las ruedas de las bicicletas de alquiler.

Opinión | Ignacio Vasallo

La cobertura de los atentados ha sido muy amplia ocupando la primera página de toda la prensa mundial y abriendo los noticieros de radio y televisión, al ser Barcelona una de las ciudades más conocidas del mundo.

Al aterrizar en Landvetter, el aeropuerto de Gotemburgo a finales de julio se huele ya ese fin del verano, por las numerosas familias de regreso de las vacaciones. Antes de montar en el autobús hasta el centro tiene que comprobar que lleva tarjeta de crédito, que es la única forma de pago, como en tantos lugares en lo que va camino de ser la primera sociedad sin metálico. Con tarjeta se paga prácticamente todo incluidos los lavabos en las estaciones o grandes almacenes, en cuyas puertas ya no existen las ranuras para meter las monedas sino lectores que al pasarla nos indican que nos han cargado cincuenta céntimos o diez coronas o en las Iglesias donde la limosna se recoge por swish, el pago por teléfono que usan casi todos los suecos.

El Mar de la Liguria tiene colores turquesa y una extraña belleza, pero como tantas partes del Mediterráneo ha sido descubierto por el turismo masivo con los consiguientes inconvenientes.

Opinión | Ignacio Vasallo

De repente el turismo interesa a todos los medios de comunicación. Han bastado unos cuantos ataques a turistas en Barcelona y Palma para que hayan entendido que hay que ocuparse de este asunto del que habitualmente, con la excepción de agosto, se olvidan. Desde el punto de vista de la propaganda, los "terroristas" han conseguido sus objetivos sin derramar una gota de sangre. Los articulistas definen estos ataques como "turismofobia". Autoridades y medios los condenan -por supuesto no todos-. Puigdemont y Junqueras se han quedado mudos para no enfrentarse a la CUP.

Ignacio Vasallo

Este no es el primer verano en el que diversos medios de comunicación arremeten contra el turismo, o más bien contra los excesos de éste, por la "turistificacion" es decir, la entrega a los turistas del centro de las ciudades en detrimento de la población local y su consecuencia, la "turismofobia". El artículo de Iñigo Domínguez en El País del 2 de julio incluye una frase demoledora "el turismo envilece los lugares y la gente". Así que ya tenemos dos nuevos palabros incorporados al metalenguaje del sector.

Leí recientemente en un folleto turístico que los tres pilares de Reino de Aragón eran:una catedral (Jaca), un castillo (Loarre) y un panteón (San Juan de la Peña). Los tres están cerca del Pirineo, el Padre del nuevo Reino y en la actual provincia de Huesca. Los esquiadores pasan cerca en su camino a Formigal, Candanchú, Astún o Cerler, pero no son muchos los que se detienen a ver las joyas del románico que hay por la zona.

Ignacio Vasallo

Con ese tono condescendiente propio de muchos intelectuales y pseudointelectuales de nuestro país, nos llegan con frecuencia los avisos de que por el camino que vamos nos convertiremos pronto en un país de camareros lo que, al parecer, tendría consecuencias nefastas.

En la capital andaluza está teniendo lugar uno de los debates más interesantes sobre el futuro de las ciudades españolas. Las disputas sobre el modelo no habían llegado a los medios nacionales hasta que se vio involucrado el malagueño más conocido. Antonio Banderas era la cara visible de un proyecto de renovación de los cines Astoria y Victoria, en la Plaza de la Merced donde nació Picasso. Se retiró acusando a algunos de sus vecinos de falta de respeto y de desagradecidos. La oposición tiró abajo el proyecto por rebasar la edificabilidad permitida en las ordenanzas municipales y dedicar excesivo espacio a la restauración.