Novak Djokovic va camino de convertirse en el mejor tenista de la historia. Sin embargo, hay cierta división tanto en su país como en el resto del mundo entre los que apoyan al crack y los que le critican, en parte por sus actitudes fuera de la pista. En esta ocasión, ha sido pillado compartiendo mantel con uno de los militares que participó en el genocidio de Srebrenica, en el que fallecieron más de 8.000 bosnios.