Un estudio que se ha publicado este jueves en la revista 'Nature' y en el que han participado investigadores del IAC y el telescopio robótico MASTER-IAC del Observatorio del Teide, ayuda a esclarecer algunas incógnitas sobre la fase inicial y la evolución de los grandes chorros de materia y energía que se forman como resultado de estas explosiones, las más poderosas del Universo.