
La empresa ubicará el negocio de mensajería eCommerce en las actuales instalaciones en Huesca y contará con 3.000 metros cuadrados en la Plataforma Logística de Huesca para albergar un almacén para cross Docking.
El crecimiento que se está produciendo en el sector del transporte y de la paquetería ha llevado a Transportes Callizo a buscar nuevos mercados, mejorar la prestación de sus servicios y a separar dos líneas de negocio para entrar de lleno en el sector de la logística y el almacenaje.
Una división de la actividad que es posible gracias a la ampliación de las instalaciones de la compañía en Huesca, donde va a inaugurar este sábado el nuevo centro en la Plataforma Logística de Huesca (PLHUS).
En este emplazamiento, la empresa oscense contará con alrededor de 3.000 metros cuadrados de almacén destinados a Cross Docking -técnica para transferir una mercancía de llegada al destino sin que haya almacenaje intermedio-, para la llegada de mercancías de Huesca y su provincia y para salidas de clientes desde Huesca al resto de España y Europa.
En estas mismas instalaciones, Transportes Callizo también dispondrá de 500 metros cuadrados de oficinas para albergar los departamentos de operaciones, tráfico, recogidas, atención al cliente, contabilidad, comercial y dirección. Además, sobre una parcela de 8.000 metros cuadrados, habrá espacio para 18 atraques para tráiler y 22 para vehículos ligeros.
La puesta en marcha de estas nuevas instalaciones no supondrá el cierre de las actuales, ya que en ellas se ubicará el negocio de mensajería e-Commerce, además de aprovecharse 1.700 metros cuadrados de almacén para logística y almacenaje. En las nuevas instalaciones trabajarán cerca de 50 personas, mientras que en las actuales continuarán empleadas 20 personas.
Dos líneas de negocio con las que Transportes Callizo incrementa su capacidad de negocio para envíos nacionales e internacionales y da un nuevo impulso a su actividad.
La empresa transportó en 2017 28.585.274 kilos y realizó 441.215 expediciones de reparto, además de 19.231.343 kilos y 49.344 expediciones recogidas a clientes para envíos nacionales e internacionales. Unas cifras que, globalmente, se elevan en un año a más de 100.000.000 de kilos y más de 800.000 expediciones por Aragón.
"Llevamos desde los inicios de la crisis con crecimientos año a año, tanto en el volumen de repartos en Aragón como de las salidas de mercancía nacionales e internacionales, crecimientos que se acentúan todavía más cuando hablamos del ámbito internacional y donde esperamos un mayor incremento los próximos años gracias a la externalización de las empresas en Aragón y a la buena comunicación de la Comunidad Autónoma", según ha explicado Alberto Callizo, director comercial de Transportes Callizo.
Además, desde Huesca, "tenemos un abanico amplio de posibilidades de cara a nuestros clientes para poder salir directos desde aquí, vía Barcelona o vía Irún, sin dejar de lado el mercado nacional, donde queremos seguir reafirmando nuestro liderazgo en Aragón y, apoyados en nuestra red, continuar con este crecimiento".
Las instalaciones de Huesca no son las únicas de la compañía en Aragón, que cuenta con delegaciones en las tres provincias aragonesas. De hecho, en Teruel, la empresa anunció en 2016 la nueva sede. En total, cuenta con cinco sedes (Zaragoza, Teruel, Soria y dos en Hueca), con 15.000 metros cuadrados de logística y distribución.
Con más de 300 delegaciones en España y Portugal, suma una plantilla total de 152 personas. Desde el año 2008, la facturación ha crecido un 75%. El 10% de la facturación es de envíos internacionales.
Casi 70 años de historia
Transportes Callizo es una empresa familiar con una trayectoria de 68 años. Nacida en Sabiñánigo en 1950 de la mano de Enrique Callizo Bueno y su esposa Agustina Oliván Morer, comenzó su andadura en el transporte de paquetería desde Jaca, Sabiñánigo y los distintos valles del Pirineo aragonés hasta Huesca y Zaragoza, con servicios diarios ininterrumpidos, a pesar de las dificultades que tenían en aquella época las carreteras de las rutas con distintos puertos de montaña y los vehículos de la época.
En octubre de 1984, se constituyó la sociedad anónima que opera en la actualidad. Además, fue el momento en el que se dio paso a la segunda generación, encabezada por Enrique y Fernando Callizo Oliván, que dirigen la empresa desde las sedes de Zaragoza y Huesca. Desde hace varios años, hay ya una tercera generación incorporada a la empresa, garantizando el presente y el futuro.