
Este servicio permitirá que los clientes puedan realizar el pago de correspondiente en esta campaña de la renta a la Agencia Tributaria con cargo a la tarjeta de crédito, mediante la modalidad de pago fraccionado. Además, permitirá disponer por anticipado del importe de la devolución si la declaración ha sido negativa.
En plena campaña de la Renta 2017, Ibercaja ha ampliado sus servicios con el fin de facilitar tanto el pago como la devolución de los contribuyentes. Para quienes la declaración de la renta les haya salido positiva, es decir, tengan que pagar a la Agencia Tributaria, la entidad financiera ofrece una serie de servicios para hacer frente a este pago a través de diferentes opciones de financiación.
Pero, sin duda alguna, uno de los más novedosos es poder efectuar este pago con la tarjeta de crédito, mediante la modalidad de pago fraccionado, siendo posible modificar con posterioridad la cantidad a pagar y realizar amortizaciones anticipadas desde la oficina, cajero o bien a través del canal online.
Las nuevas prestaciones también se ofrecen para los contribuyentes cuya declaración de la renta sea negativa. Es decir, la Agencia Tributaria tenga que hacerles una devolución. En este caso, la entidad ofrece disponer por anticipado del importe correspondiente de la devolución.
Estos servicios se suman al asesoramiento personalizado a los clientes sobre las alternativas que sean más beneficiosas para el ahorro, teniendo en cuenta los aspectos financiero y fiscal, así como las circunstancias personales.
También cuenta con una amplia gama de planes de pensiones y seguros de ahorro, aparte de contar con herramientas de asesoramiento y planificación para ayudar al cliente en la elección de la mejor alternativa.
Además, Ibercaja está prestando ya en las oficinas de la entidad un servicio de atención a los clientes de Banco Personal -que así lo requieran-, para ayudarles en la realización o presentación de la declaración de la renta, resolución de dudas o sobre los cambios y novedades fiscales que afectan a las decisiones de inversión.
Dentro del asesoramiento, se ha incorporado el de la figura de Patrimonio Protegido para personas con discapacidad, que consiste en una fórmula de ahorro para atender las necesidades de las personas con discapacidad y que cuenta con el beneficio de diferentes ventajas fiscales en distintos impuestos.
El Patrimonio Protegido es un conjunto de bienes y servicios que se constituye en beneficio de una persona con discapacidad con las aportaciones realizadas por esa misma persona o de sus familiares. Este patrimonio tendrá tiene la particularidad de que debe dedicarse a los gastos derivados de su cuidado. Además, tiene que formalizarse mediante escritura pública o por resolución judicial.