En los últimos diez años, la comunidad aragonesa ha perdido un total de 643 autónomos transportistas por la inviabilidad de su actividad.
Aragón ha visto descender su número de autónomos transportistas en los últimos diez años. Una década en la que la comunidad ha pasado de registrar un total de 6.790 autónomos transportistas a 6.147 en el mes de julio de este año, lo que supone 643 profesionales menos y una caída, en términos relativos, del 10,5%, según los datos facilitados por ATA.
La comunidad aragonesa no es la única en la que se ha producido un descenso en el censo y afiliación de los autónomos transportistas, ya que esta disminución ha sido generalizada en España, donde se ha perdido en una década 36.713 autónomos transportistas, el 18,6% menos.
De esta manera, se ha pasado en España, de 234.510 autónomos transportistas activos en julio de 2008 a 197.797 en julio de 2017. Es decir, uno de cada cinco transportistas se ha perdido en los últimos diez años.
El descenso de autónomos transportistas en Aragón ha sido más moderado que en el conjunto de España y que en otras autonomías como Cantabria, donde se ha experimentado un descenso del 26,2% en los últimos diez años, así como en la Comunidad Valencia con el 24,9%. También son significativas las caídas en Castilla y León y Murcia con una bajada del 23,7% y del 21,7%, respectivamente.
Ante esta situación, desde ATA han solicitado dos años más de la prórroga de los límites de facturación como ya se concedió y se publicó, posteriormente, en el BOE del 30 de octubre de 2015 con el fin de evitar más ceses por inviabilidad y que los profesionales que han conseguido mantener su actividad a pesar de la crisis puedan seguir realizándola.
Un aplazamiento de dos años, para 2018 y 2019, durante el que los transportistas autónomos podrían seguir en módulos si no superan los 125.000 euros de facturación a empresa.
El nuevo límite se establece en 75.000 euros de máxima, lo que aumenta los costes fiscales, y obliga a muchos profesionales a pasar a estimación directa, explican desde la asociación de autónomos.
Desde ATA consideran injusta la situación porque "si la facturación se reduce de 125.000 a 75.000 euros al año, los transportistas van a ver incrementadas sus obligaciones fiscales. La sangría de autónomos transportistas será evidente", según Lorenzo Amor, presidente de ATA, quien afirma que "los transportistas en España ya han sufrido bastante con la crisis".