La competitividad de las empresas y el déficit de infraestructuras y comunicaciones son los principales problemas que más preocupan a los economistas de Aragón. Y es que las empresas han hecho los deberes reduciendo costes para ser más competitivas, pero invierten muy poco en innovación.
Los economistas aragoneses tienen una buena percepción de la economía aragonesa, visión que además ha aumentado en relación al año pasado, puesto que en la actualidad el 40% cree que la situación económica de la comunidad es positiva frente al 27% que tenía esa percepción en 2015, según ha explicado Javier Nieto, decano del Colegio de Economistas de Aragón, durante la presentación de la Encuesta de Coyuntura 2016 realizada por el Colegio entre 1.473 economistas aragoneses.
La percepción de la economía española también es positiva y ha crecido, pasando del 24% en 2015 al 43% en 2016, mientras que en relación a Europa se observa un crecimiento menos acentuado en esa perspectiva, ya que solo se ha crecido en el último año en tres puntos porcentuales, situándose en el 46%.
Un porcentaje sobre el que se esconde, al analizarlo con más detalle, un cierto empeoramiento de las perspectivas de la situación económica europea, ya que ha bajado el porcentaje de los economistas que la consideran favorable, bajando del 62% al 51%, aparte de subir los que creen que la percepción es mala, porcentaje que ha crecido el 35% al 48%. Estos datos se explican porque "los economistas detectan una pérdida de peso de la economía de la Unión Europea en el mundo".
Sin embargo, a pesar de la perspectiva favorable, la Encuesta de Coyuntura 2016 pone de manifiesto que los economistas ven problemas importantes o muy importantes en la economía aragonesa.
El principal de ellos -se apunta en el 77%-, es el de la falta de competitividad, que no se origina por los costes, "sino por una I+D+i insuficiente, la falta de valor añadido, nuevos tecnologías y el desarrollo de nuevos productos y procesos productivos", según ha explicado Francisco Gracia, vicedecano del Colegio de Economistas de Aragón.
Gracia ha señalado que "las empresas han hecho su trabajo y se ha ganado competitividad por la vía de los costes, lo que ha permitido dar la vuelta a la balanza comercial", aunque no se puede seguir manteniendo la vía de disminución de salarios, teniendo que ganar en competitividad por la I+D+i.
Un factor en el que las empresas aragonesas son suspendidas por el 88% de los economistas aragoneses, ya que el 68& cree que la I+D+i es una de las principales deficiencias de la economía aragonesa y un 20% afirma que no se ha hecho nada en este aspecto.
Además de la competitividad, los economistas también ven como otro de los problemas más importantes de la economía aragonesa el déficit de infraestructuras y comunicaciones, que apunta el 65%, así como el paro que es indicado por el 57%, aunque que deja de estar en primera posición en comparación con otras encuestas anteriores por la leve mejora de la tasa de desempleo y las mayores perspectivas de mejoría del mercado de trabajo.
En menor medida, se pone el foco en otros aspectos como la inadecuada dimensión de las empresas aragonesas -que afirma el 20%-, y la dependencia de sectores de actividad concretos, que señala el 27%.
En la encuesta de coyuntura, los economistas aragoneses también han valorado las medidas del Ejecutivo aragonés. El 89% le suspende en simplificación de trámites administrativos al considerar que no se ha avanzado en este campo, así como en la adecuación de la formación del capital humano de la empresa, que señalan el 80%. Por su parte, el 73% de los economistas también ve como insuficiente la mejora de la intermediación financiera.
Entre los aspectos positivos, figuran el fomento de clusteres y redes de microempresas, acción que es avalada por el 30% de los economistas, y el apoyo a la internacionalización, que también es puntuado con el mismo porcentaje que el anterior.
Problemas a medio y largo plazo
La encuesta también alude a la preocupación ante problemas de la economía española a medio y largo plazo. En primer lugar, los economistas aragoneses apuntan como primer motivo preocupante el envejecimiento de la población, que se apunta en el 90%, seguido de la pérdida de la presencia de Europa en el mundo (67%), deuda pública con el 60% y los riesgos geopolíticos con el 31%.
Además, e Brexit es otra de las preocupaciones de los economistas aragoneses. La salida del Reino Unido se considera que es negativa, mostrando especial preocupación por que ese proceso se produzca de forma lenta al generarse mayor incertidumbre. Una idea que expone el 67% de los economistas, mientras que el 47% considera que sería positivo que la salida se produjera de forma rápida. Sobre la integración europea, el 73% de los economistas cree negativa una integración a la carta y el 71% está a favor de que sea única.
En relación a la economía de España, la encuesta igualmente alude a una serie de factores que son vistos como problemas. En concreto, el 83% de los economistas apuntan como principal motivo de preocupación la soberanía por su impacto sobre la economía -parámetro que se ha introducido por primera vez en la encuesta-, así como la corrupción, que se sitúa en segundo lugar con el 74% de los encuestados. Además, el 70% ve como un handicap la fragmentación política.
Dentro de las prioridades que se demandan, la clarificación de la distribución de competencias entre Estado y las autonomías es apuntada por el 78%, mientras que el 71% alude a la mayor liberalización del mercado de trabajo y el 43% cree que es prioritaria la eliminación de desgravaciones y regímenes especiales. Finalmente, el 34% señala la devaluación fiscal.
Muestra
La Encuesta Coyuntura 2016 del Colegio de Economistas ha sido realizada con una muestra representativa sobre una población de 1.473 economistas aragoneses. El grado de fiabilidad es del 95% y el margen de error es del 4%.
De los encuestados, el 51% son empresarios y/o son ejercientes libres; el 37% es empleado por cuenta ajena; el 6% es funcionario; el 4% es jubilado y el 2% está en situación de desempleo.