La producción será inferior a la del año 2015, ejercicio en el que se recogieron más de 547,5 toneladas de frutas, al estimarse una reducción en prácticamente todos los cultivos con la excepción de la cereza. Los agricultores piden medidas para seguir haciendo frente a las consecuencias del veto ruso y a la difícil situación que atraviesa el sector.
En el caso del melocotón se prevé que se produzca una reducción del 10% sobre el año 2015 con una estimación de 189.000 toneladas, mientras que en la nectarina se calcula que la reducción será del 12% sobre 2015 al recogerse unas 135.000 toneladas, según los datos facilitados por UAGA.
En el albaricoque la reducción será del 20% con una cosecha estimada de 12.800 toneladas como consecuencia de las heladas primaverales, mientras que en el ciruelo se producirá una merma del 5%, situándose esta cosecha en las 6.600 toneladas.
Algo inferior será también la cosecha de manzana, en un 17% de media, aunque en variedades concretas como la golden el descenso puede llegar a ser de hasta un 25% mientras que en las variedades rojas caerá en torno al 15% y se llegará a las 72.000 toneladas.
Sin embargo, en el caso de la cereza, las previsiones son más favorables y los productores estiman que se producirá un aumento de la producción del 15%, de manera que se podrán alcanzar las 25.300 toneladas. En la pera, las estimaciones apuntan a un mantenimiento de la producción en los niveles del año anterior de alrededor de 50.000 toneladas.
Una difícil situación
Los agricultores aragoneses han denunciado la difícil situación por la que atraviesa el sector y que no solo es consecuencia de las condiciones meteorológicas, sino que también responde a otras causas políticas y económicas como el veto ruso sobre la exportación de productos agrícolas de la Unión Europea que ha tenido un impacto negativo en el sector en las últimas campañas.
Desde UAGA señalan que hay también otros problemas que están afectando al sector como la competencia planteada por las importaciones incontroladas procedentes de terceros países y el aumento de la producción y mayor coincidencia de calendarios de producción con otros países competidores de la Unión Europea.
El sindicato reclama que se adopten medidas para el sector, pidiendo que se incluyan el conjunto de frutas y hortalizas dentro de las medidas excepcionales para dar apoyo a los productores de determinadas frutas y hortalizas al veto ruso y que se prorrogarán ante su fin el próximo día 30 de junio de 2016. Para UAGA es importante que se incluyan todas las frutas y hortalizas porque el veto afecta a todas las producciones.
Además, también se pide al Ejecutivo comunitario que se aumenten los precios de retirada de las frutas, es decir las cotizaciones a partir de las cuales los productores perciben ayudas por sacar su producto del mercado, ya que con los precios de referencia actuales no se cubren los costes de producción y esto genera, a su vez, que el mecanismo no resulte atractivo.
