
La empresa ha realizado una inversión de dos millones de euros para disponer de unas instalaciones más modernas y que permitirán a la joyería ahondar en su especialización y llegar a más público.
Tarín Joyeros está de aniversario. La empresa, especializada en joyería, celebra sus 50 años desde que iniciará su andadura en Zaragoza. Un período en el que se ha pasado a tener un equipo formado por 15 trabajadores y a contar con tres establecimientos en la capital zaragozana.
Tarín Joyeros, que es una empresa 100% familiar y de capital 100% aragonés, ha realizado recientemente inversiones de más de dos millones de euros con el fin de disponer de un nuevo espacio más moderno y confortable en el centro de la ciudad y ahondar en su especialización para llegar a un público más específico y garantizar una atención más personalizada y muy profesional, según indican desde la compañía.
Unas inversiones con las que la empresa también sienta las bases para su futuro y para asumir los retos para los próximos años y que pasan por continuar y reforzar su presencia en Aragón, diseñando joyas y ampliando las colecciones sin perder calidad y el estilo propio de la firma.
Además, Tarín Joyeros también se ha marcado el objetivo de poder llegar a un público local más joven con un poder adquisitivo menor y para los que diseñan diferentes piezas de joyería como anillos de compromiso, pendientes de novia, alianzas, relojes o joyas conmemorativas para acontecimientos especiales. Además, también se pretende incorporar a profesionales con un perfil más joven para llegar a ese segmento de público. Una línea en la que la empresa ya ha comenzado a dar algunos pasos con la colección Tarin Atelier y T By Tarín, que está diseñada para un público más joven.
La empresa cuenta con un taller propio en Zaragoza en el que se realiza todo el diseño de las piezas de alta joyería, aparte de transformar o modernizar joyas por encargo. De hecho, todas las piezas se realizan en España con la excepción de algunas joyas especiales de brillantes, que se elaboran en Italia. También tienen un servicio técnico de alta relojería, que está dotado con máquinas de última generación y un técnico especializado en Suiza.
Tarín Joyeros tiene una plantilla de 15 personas, que está liderada por María José y Marco Antonio Tarín y al que también sigue muy atenta su madre, Fina Tarín. Esta última, junto con su marido, fueron los creadores de la empresa con una primera tienda en la calle Cortes de Aragón.
La firma cuenta, desde hace 22 años, con la colaboración de Corrado Scapini, licenciado en Gemología y especialista en Diamante, que es uno de los cinco embajadores de la misión española de la Fondation de la Haute Horlogerie (Fundación de la Alta Relojería con sede en Ginebra).
En estos 50 años, la empresa ha tenido algunos hitos como la relación con Cartier cuando en España era una firma conocida solo por la realeza y la nobleza y la instalación de un corner Rolex en su joyería del Paseo de Constitución, que fue el primero de estas características en España.