El consejero de Hacienda y Administración Pública del Gobierno aragonés, Javier Campoy, ha defendido la Ley de medidas fiscales y administrativas de Aragón, durante el Debate de las enmiendas a la totalidad. Según ha explicado, todos los contribuyentes se beneficiarán de la rebaja fiscal con la que se dejarán 25 millones de euros en los hogares aragoneses.
Durante su intervención en las Cortes de Aragón, el consejero de Hacienda del Gobierno de Aragón, Javier Campoy, ha explicado que la bajada de impuestos impulsada por el Ejecutivo aragonés para el año 2015 "no sólo motivará a la iniciativa privada" sino que además "refuerza a Aragón en su liderazgo como una de las Comunidades con menor presión fiscal. Y eso incentiva la captación de empresas, de talento, y fomenta la creación de puestos de trabajo".
La principal medida de esta Ley de medidas fiscales y administrativas de la Comunidad Autónoma de Aragón para 2015 es la histórica rebaja del tramo autonómico del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), que beneficiará a todos los contribuyentes aragoneses y que permitirá dejar 25 millones de euros en sus bolsillos, según ha afirmado el consejero.
No obstante, los más beneficiados por esta rebaja fiscal serán los trabajadores con salarios más bajos, ya que las bases liquidables iguales o inferiores a 12.450 euros, que son 4 de cada 10 contribuyentes en Aragón, reducirán su tributación en un 16,7%. Su tipo aplicable pasará del 12% actual al 10%, lo que significará un ahorro de hasta 248 euros para un ciudadano con esa base liquidable.
Los tramos siguientes de base liquidable experimentarán también la rebaja de forma significativa. En concreto, las bases liquidables situadas entre los 12.450 y los 20.200 euros (tramo en el que se engloban el 25% de los contribuyentes) tendrán una rebaja fiscal del 10,5%, al ver reducido su tipo del 14% al 12,50%. De esta manera, una persona con una base liquidable de 20.200 euros pagará 260 euros menos de impuestos.
Además, la reforma del Ejecutivo aragonés hará más progresivo el impuesto, ya que modifica la estructura de la escala autonómica del IRPF e introduce un tramo más de los que había hasta ahora.
Efecto revitalizador
El consejero durante su intervención también ha expuesto el impacto positivo que esta rebaja de impuestos va a tener para la sociedad aragonesa y para combatir los efectos de la crisis.
Campoy ha afirmado que "son 25 millones de euros que van a quedar en los hogares aragoneses, un importe que será gastado e invertido, y tendrá un efecto revitalizador. Aumentará el poder adquisitivo de los ciudadanos, lo que potenciará el consumo. El consumo aumentará la actividad de las empresas, que invertirán y contratarán. Actividad económica y puestos de trabajo van unidos. Es decir, la reforma fiscal que aprueba el Gobierno de Aragón actuará como un combustible capaz de acelerar la recuperación económica".
Crecimiento económico
El consejero de Hacienda y Administración Público también ha definido la reforma como "un punto de inflexión en un largo camino" y la ha situado en el contexto actual, en "el fin de una larga recesión" en la que Aragón ya registra "indicadores económicos positivos y buenas perspectivas de crecimiento".
Un indicador que se suma a otros como las "bajadas del paro o el crecimiento sostenido en el tiempo", ha señalado en relación a los cuatro trimestres consecutivos de crecimiento del PIB que ha registrado Aragón. "Son pruebas definitivas de la eficacia en la gestión, de la eficiencia de un gobierno".
No obstante, Javier Campoy ha puntualizado que "es una fase de crecimiento frágil todavía, que hay que cuidar y en lo posible animar y estimular. Esta es la estrategia de los Presupuestos de 2015, de la que también es parte la presente ley de Medidas Fiscales y Administrativas".
En este sentido, ha recordado que los Presupuestos del próximo año son "ligeramente expansivos" y priorizan la protección de los servicios sociales, de Educación y Sanidad, y refuerzan las actuaciones dirigidas al crecimiento económico y empleo.
Otros beneficios fiscales
Además de la rebaja del IRPF, la Ley de Medidas introduce también otras mejoras de carácter fiscal, entre las que cabe destacar la deducción por gastos de guardería y el aumento de la bonificación en el Impuesto de Sucesiones y Donaciones hasta el 65%.
En el primer caso, la bonificación por guardería tiene como objetivo "premiar el esfuerzo de las familias aragonesas y favorecer la conciliación de la vida laboral y familiar", según ha expuesto el consejero Campoy. Una ayuda que puede alcanzar los 270 euros por niño menor de 3 años.
Además, "pensando en los aragoneses y en el territorio" la Ley amplía la deducción por adquisición de vivienda habitual en núcleos rurales. Una medida introducida anteriormente por este Gobierno, ya vigente para todos los contribuyentes residentes en municipios con una población inferior a 3.000 habitantes, y que en 2015 beneficiará también a aquellos que residan en pequeñas poblaciones que formen parte de municipios de mayor población.
Por otro lado, en cuanto al Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados, se amplía a los cuatro años el plazo para la aplicación del tipo impositivo especial en los casos de compraventa de vivienda habitual por familias numerosas, dando mayor holgura temporal a esta operación. El objetivo es "ser sensibles al contexto de mercado que nos ha acompañado estos años y realistas respecto a los plazos en los que se materializan las transacciones".