
El grupo empresarial ha destinado esta inversión principalmente a la nueva prensa de 4.800 toneladas que acaba de poner en funcionamiento en su centro productivo de Nuez de Ebro en Zaragoza.
Esta instalación es de alta tecnología y sistemas de industria 4.0 con el fin de producir perfiles de aluminio en gran formato, convirtiéndose en una de las más avanzadas de España por sus características.
La empresa ha acometido esta inversión en un momento de crecimiento. El ejercicio de 2021 lo cerró con una facturación de 140 millones de euros y una producción que superó las 31.000 toneladas.
Unos datos que suponen un crecimiento del 40% sobre el ejercicio anterior y con los que mantiene esta línea ascendente de los últimos años tanto en volumen de negocio como en empleo. Precisamente, el grupo empresarial ha generado 100 empleos en los últimos cuatro años, alcanzando los 380 puestos de trabajo en la actualidad. La previsión es seguir creciendo en plantilla -en torno a los 70 empleos en dos años- para lo que la compañía tiene habilitado un apartado en su web para la recepción de currículos.
En la evolución de la empresa, la internacionalización ha sido clave desde 1981, fecha a partir de la que comenzó a exportar. El grupo destina el 75% de su fabricación a 14 mercados exteriores en los que está presente en la actualidad a través de seis delegaciones internacionales. Un porcentaje que se ha ido incrementando progresivamente y, sobre todo, desde 2005, ejercicio en el que las ventas al exterior se situaban en el 27%. Aproximadamente, 3 de cada 4 kilos extruidos en Inalsa se destinan a los mercados exteriores.
Además, el grupo empresarial tiene diez delegaciones nacionales. En Aragón, Grupo Inalsa cuenta con dos centros productivos. Uno de ellos es el de Nuez de Ebro, que ocupa más de 50.000 metros cuadrados de superficie y complementa al que tiene en la carretera de Cogullada, de 26.000 metros cuadrados.
Aparte de la nueva prensa, el centro de Nuez de Ebro también alberga el almacén central de Alcar, empresa del grupo que centra su actividad desde hace más de 50 años en el diseño y producción de sistemas de carpintería de aluminio, una planta de anodizado, centros de mecanizado y modernos robots de corte y estampado totalmente automatizados.
La tecnología de Alcar también es vanguardista. Gracias a ella, Grupo Inalsa lanza al mercado sistemas de corredera y abatibles, muros cortina, barandillas, fachadas ventiladas y componentes para ventanas. Son productos que se han instalado en edificios como el Auditorio de Tenerife, los hospitales de Móstoles y Burgos o la sede de la Agencia Efe en Madrid. También se han empleado en el edificio Plaza 14 de Zaragoza o el Centro de Especialidades Médicas Inocencio Jiménez.
Alcar conforma, junto con Anesa (lacado, anodizado y sublimación del aluminio) y Zamecal (mecanizado y estampado), que también están en el complejo industrial de Nuez de Ebro, el conjunto de actividades que engloba el Grupo Inalsa, que se ha convertido en una de las mayores empresas del sector en Europa.
Más de 100 sectores
Con sede central en Zaragoza desde hace más de 60 años, la empresa trabaja el aluminio de forma integral y aborda una amplia variedad de procesos, que comprenden desde la extrusión al lacado y anodizado a la mecanización de piezas y elaboración y comercialización de sistemas de carpintería de aluminio.
Los perfiles de aluminio de Grupo Inalsa están presentes en al menos 117 sectores industriales distintos como el ferroviario, las energías renovables, la automoción, la agricultura, la construcción, el transporte terrestre o las instalaciones deportivas.
De este modo, se encuentra el aluminio extruido en alguna de las cinco prensas de la empresa, que totalizan una capacidad máxima instalada de 62.000 toneladas, en seguidores solares y aerogeneradores, componentes estructurales de automóviles, puntales y andamios de construcción, camiones, remolques para animales, ambulancias, toldos, láminas de persianas, centros de transformación eléctrica o porterías de fútbol, entre otros.
Además, Inalsa fabrica perfiles de aluminio con diferentes aleaciones: desde un centímetro de longitud a 15 metros, y con espesores de uno a 70 milímetros, que pueden ser mecanizados a demanda.
La actividad de la empresa y los detalles de la inversión han sido dados a conocer durante la visita que han realizado a las instalaciones de Nuez de Ebro el consejero delegado del Grupo Inalsa, Blas Martín, y el vicepresidente del Gobierno de Aragón y consejero de Industria, Competitividad y Desarrollo Empresarial, Arturo Aliaga. Además, también ha visitado las instalaciones la alcaldesa de la localidad, María Isabel Toro.
Durante su visita, Aliaga ha destacado la evolución de esta empresa que "se ha convertido en un referente del sector del metal aragonés", además de consolidarse en la comunidad aragonesa "gracias a la competitividad de sus productos, aumentando año tras año su volumen de negocio".