La nueva planta supondrá una inversión de 15,1 millones de euros y la creación de 12 empleos directos cualificados y 57 indirectos en la zona.
El Consejo de Gobierno ha aprobado hoy la Declaración de Interés Autonómico de esta nueva planta dedicada a la producción de biometano y fertilizantes a partir de residuos orgánicos en la localidad oscense de Vencillón.
Esta nueva instalación, promovida por Enagás Renovable y la ingeniería energética Genia Bioenergy, podría empezar a funcionar en diciembre de 2023. La previsión es que se generen 12 empleo directos cualificados y otros 57 indirectos asociados al transporte de materia prima y la gestión de los subproductos. La inversión total para su desarrollo se cifra en 15,1 millones, según han explicado desde el Gobierno de Aragón en una nota de prensa tras el Consejo de Gobierno.
El proyecto -que los promotores presentaron recientemente al Departamento de Economía, Planificación y Empleo- comprende el diseño, construcción y explotación de una planta de biometano y el ducto que permita su inyección a la red, capaz de gestionar los residuos y subproductos orgánicos de diferentes industrias agroalimentarias (residuos alimentarios caducados y lodos orgánicos industriales) y ganaderas (purines y estiércoles), transformándolos en un proceso de digestión anaerobia.
El biogás generado se limpia y purifica para la generación de biometano que, mediante una tubería de conexión, se inyectará en la red troncal de gasoductos de Enagás para así descarbonizar dicha red y, por lo tanto, el transporte de gas natural a alta presión en España.
La previsión es que esta iniciativa de economía circular permita gestionar y valorizar hasta un máximo de 170.000 toneladas anuales de residuos orgánicos inyectando a la red 9.417.871 Nm3 anuales de biometano.
Con este objetivo, en la zona de recepción se instalarán equipos adecuados para la gestión de los residuos y, tras los pretratamientos correspondientes de cada material, se procederá a enviarlos al proceso principal de digestión anaerobia con bacterias para la producción de gas renovable.
En el proceso se produce también una "enmienda orgánica", por proceso circular, similar a un compost y un fertilizante líquido igualmente orgánico que pueden volver a los cultivos cerrando el ciclo de la economía circular y resolviendo de paso el problema de la gestión de biorresiduos especialmente complicados de tratar (como purines, estiércoles y otros residuos susceptibles de contaminar suelos o acuíferos) mediante un proceso natural, agronómicamente seguro y sin olores.