La filial onubense de Freeport McMoRan facturó el pasado año 1.780 millones, de los que el 54% fueron en el exterior, especialmente países del Mediterráneo y Asia
Aunque habitualmente asociamos las exportaciones andaluzas al aceite y la industria agroalimentaria, algunas de las mayores empresas exportadoras de la región se mueven en ámbitos bien distintos. Es el caso de Atlantic Copper, la empresa onubense filial de Freeport-McMoRan, que lleva seis años siendo la empresa con mayor volumen de exportación de Andalucía, seguida muy de cerca por otra del sector industrial, la gaditana Acerinox.
La empresa liderada por Javier Targhetta exportó el pasado año el 54 por ciento de su producción, que alcanzó unas ventas totales de 1.780 millones de euros. En concreto, Atlantic Copper realizó exportaciones por valor de 925 millones, siendo sus principales mercados los países del Mediterráneo y Asia.
Atlantic Copper es la tercera mayor fundición y refinería de cobre de Europa y la única en España. En 2015, en su complejo metalúrgico ubicado en Huelva se fundieron 1.045.000 toneladas de concentrado de cobre, la materia prima que recibe de minas radicadas en varios continentes.
En el proceso de refino del cobre se obtuvieron 285.000 toneladas de cátodos de cobre de alta calidad, lo que ha supuesto un nuevo récord de producción de este metal. Junto al cobre, Atlantic Copper es el mayor productor nacional de ácido sulfúrico, que se utiliza, principalmente, en la industria de fertilizantes, la minería y como materia prima para la fabricación de pinturas, pasta de papel y en otros muchos procesos químicos.
En 2015, la producción de ácido también superó, como en años anteriores, el millón de toneladas, concretamente, 1.035.000. Además de estos dos productos, dentro del portfolio de la compañía también destacan el silicato de hierro, un derivado de los procesos metalúrgicos que se utiliza principalmente en la fabricación de morteros y cementos, y del que obtuvo 620.000 toneladas en 2015; y los metales preciosos, sumando 6 toneladas de oro y 68 de plata en el pasado ejercicio.
La actividad de Atlantic Copper genera el 10 por ciento del tráfico del Puerto de Huelva -mueve más de 300 barcos al año entre materias primas y productos- y el transporte por carretera se sitúa alrededor de 2,5 millones de toneladas al año, lo que supone más de cien mil viajes de camión al año. Con esos datos, parece obvio el impacto de esta empresa en la economía andaluza en general y en la onubense en particular.
Aportación a Andalucía
Esta empresa, que nació en 1970 y fue comprada por Freeport McMoRan en 1993, genera en estos momentos en torno a 1.000 empleos directos, estimándose en más de 3.000 la suma de empleos totales -directos, indirectos e inducidos-. Tanto su plantilla propia como la de empresas contratistas han aumentado, además, en un 6 por ciento desde el año 2011.
Además, la compañía aporta una media anual de 155 millones de euros a la economía andaluza, de los que cerca del 45 por ciento se materializa en forma de salarios y el resto en compras que incluyen servicios de empresas auxiliares, energía, materiales y otros.
La empresa se muestra orgullosa de su aportación a la Comunidad y se reivindica frente a aquellos colectivos que critican, no sólo a esta firma, sino a todo el sector industrial de Huelva. Este año ha inaugurado, con la asistencia de la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, su nuevo Centro de Interpretación del Cobre, un espacio cuyo objetivo es mostrar a la sociedad el importante papel que desempeña este metal en la vida cotidiana, sus múltiples usos y aplicaciones y su valor social en muy diversos campos, como la sanidad, los transportes, las nuevas tecnologías y comunicaciones, la construcción y los hogares, el diseño y la arquitectura y un largo etcétera, así como la estrecha vinculación de la provincia onubense con la metalurgia desde hace miles de años.
Las inversiones medioambientales realizadas por Atlantic Copper en los últimos 10 años se acercan a los 100 millones de euros, centrando sus esfuerzos en conseguir la excelencia en el cuidado medioambiental, como demuestra la reducción de emisiones de dióxido de carbono, CO2 -un 29 por ciento-; la reducción de la emisión de partículas un 80 por ciento -un 84 por ciento por debajo del límite legal en este momento- y la reducción de las emisiones de SO2 un 51 por ciento -un 68 por ciento por debajo del límite legal-. La empresa acometió en 2015 inversiones por valor de más de 23 millones de euros, cifra que supera en 7 millones las ejecutadas en 2014 y que volverá a crecer en el ejercicio actual.