
El 2021 ha vuelto a ser un año de incertidumbre para el mercado inmobiliario que a las circunstancias complejas derivadas de la pandemia le ha sumado el incremento de precios de los materiales de construcción.
Una situación que sin embargo no ha afectado a todos los segmentos y es que la demanda de vivienda de alta gama se ha disparado, superando incluso a la oferta en algunas
zonas como la Costa del Sol.
La mayoría de empresas que se dedican al sector han
multiplicado su actividad, superando incluso las cifras que venían registrando antes de la pandemia. Las previsiones son positivas y los expertos auguran que el segmento de lujo seguirá creciendo también en 2020.
En Andalucía la mayor oferta de viviendas de alta
gama se concentra en la Costa del Sol, aunque también destacan otras zonas como Sotogrande, San Roque (Cádiz) y comienzan a sumarse Málaga capital o Sevilla.
La compañía alemana Engel & Völkers, una de las
más destacadas en la intermediación de viviendas de lujo, ha cerrado el 2021 con cifras históricas, alcanzando por primera vez los 3.000 millones de euros en operaciones en España, lo que supone un 88% más que en 2020 y un crecimiento del 65,5% frente a 2019.
Según ha indicado a elEconomista Andalucía, Mario
Garnica, director Engel & Völkers Málaga, solo en la
capital malagueña el volumen de las intermediaciones ha superado los 80 millones de euros, alrededor de un 80% más que el año anterior.
"Málaga está creciendo muchísimo por su proyección internacional, los clientes a raíz de la pandemia cada vez demandan más casas individuales
y con zonas verdes. El teletrabajo ha disparado el
interés por este tipo de inmuebles", apunta el director.
Las cifras se disparan al incluir toda la oferta de la
región, que se centra principalmente en Marbella y
su zona de influencia hasta alcanzar Sotogrande,
donde la inmobiliaria ha realizado operaciones por
más de 600 millones de euros.
El precio medio de las viviendas que vende esta inmobiliaria parte desde los 700.000 euros en Málaga y asciende hasta los 1,8 millones en el triángulo
de oro formado por Estepona, Marbella y Benahavís, donde la compañía ha realizado intermediaciones de algunas villas que superaban los 10 millones de euros.
El perfil de clientes de este segmento inmobiliario
es variado, aunque los extranjeros continúan acaparando la mayor parte de las operaciones. A pesar
de la incertidumbre generalizada Engel & Völkers
estima que el 2022 también va a ser un año de crecimiento para el segmento de lujo.
"Este sector crece cuando hay crisis, además muchos inversor esestán apostando por el mercado inmobiliario como un valor seguro", prevé Garnica.