
La empresa compostelana de artes gráficas Tórculo dice adiós de forma definitiva después de más de 40 años de experiencia. La compañía llevaba un año en concurso de acreedores y el plazo para las ofertas concluyó sin que ninguna fuera admitida, de modo que Tórculo Comunicación Gráfica S.A. bajó la persiana de forma definitiva el pasado 30 de junio. En los últimos tiempos, Tórculo, que contaba con local en la zona viaje de Santiago -en la Praza de Mazarelos- e instalaciones en el polígono del Tambre, disponía de una plantilla de 48 trabajadores.
La situación era de sobra conocida por sus 40 trabajadores quienes sabían que la situación económica era muy grave, y que las posibilidades de este final eran muy posibles frente a la opción de salvarse. Hace poco menos de un mes, la tienda de Mazarelos muy frecuentada por los universitarios cerró sus puertas, y la desaparición de la firma se formalizó definitivamente.
También se cerraron sus instalaciones en el Tambre. Ahora, las indemnizaciones a los trabajadores quedan en manos del Fogasa (Fondo de Garantía de Salarial), que abonará a los empleados una parte de la compensación que les correspondería, en ningún caso la totalidad de la misma. La empresa logró pagar hasta la última nómina a la plantilla pero la indemnización por despido será abonada por el Fondo de Garantía Salarial.
La empresa de artes gráficas Tórculo Comunicación Gráfica fue todo un símbolo de consolidación de la capital gallega. De hecho, la empresa celebró en el 2022 una gran fiesta de aniversario cuando cumplió los 40 años. Por entonces, nadie hubiera predecido este final, sólo tres años después. El alma máter de Tórculo fue Jacobo Bermejo quien tuvo unas palabras de agradecimiento a todas las personas que le acompañaron a lo largo de estos años, y a la gente que creyó en ellos.