Zaragoza
Sin novedades en el Mundial de Fútbol 2030, pero se van dando nuevos pasos en la operación Romareda. El campo de fútbol modular, conocido popularmente como la mini Romareda, estará finalizado antes del próximo día 20 de julio. Un mes en el que se contempla también que comience a derribarse la parte más visible del estadio de La Romareda. Unos trabajos que se contempla que estén totalmente finalizados en octubre de este año.
En concreto, la entrega de este campo modular y provisional se entregará de forma definitiva entre los días 18 y 20 de julio, según ha explicado la alcaldesa de Zaragoza y presidenta de la Sociedad Nueva Romareda, Natalia Chueca, tras la celebración del Consejo de Administración de hoy en el que se ha aprobado la entrega del acta provisional.
Chueca ha dado cuenta de los trabajos realizados y del estado de las obras de los dos estadios de fútbol. En relación a la mini Romareda ha recordado que la construcción se está llevando a cabo en cuatro meses. Precisamente, la semana pasada se hizo la conexión a la electricidad, lo que permite continuar con las obras. "Es un ejemplo más de cómo esa sincronización ha sido exacta, no solamente en el coste, sino también en la capacidad de ejecución del proyecto".
Quedan pendientes otra serie de trabajos como la instalación de los focos, que proceden de la actual Romareda, que se prevé que se coloquen en una semana, mientras que los videomarcadores se instalarán el día 13 de julio. Dos días después, el 15 de julio, se procederá con la megafonía. De momento, ya se han finalizado el control de accesos de La Liga, aunque falta conectarlo, al igual que la lona exterior. Las lonas, además, están pendientes porque todavía no se tiene el 'nanimg' definitivo. De momento, hay una propuesta interesada.
La presidenta de la sociedad Nueva Romareda ha incidido en que los plazos se están cumpliendo según lo previsto para construir este mini campo de fútbol "en tiempo récord", sobre todo teniendo en cuenta que no existe otro campo modular, con capacidad de 20.000 plazas, en La Liga española y que esté homologado, aparte de cumplir con todas las especificaciones. Unos plazos que permitirán que el Real Zaragoza pueda jugar ya la próxima temporada.
Además, se sigue trabajando también en el Plan de Movilidad para facilitar el acceso de los equipos deportivos, profesionales y aficionados. En esta línea, Chueca ha adelantado que se contempla el tranvía, así como dos lanzaderas de transporte público de autobús con una frecuencia de cuatro minutos. También habrá dos aparcamientos. Uno de ellos contará con 1.205 plazas más 31 de movilidad reducida, mientras que el otro dispondrá de 460 plazas más 12 de movilidad reducida.
Lo que no tendrá este mini campo de fútbol es grada de animación por motivos de seguridad, pero sí cabe la posibilidad, si el Real Zaragoza quiere, es disponer de una zona de restauración.
Un estadio ejemplar y sin sobrecostes
Durante su intervención ante los medios de comunicación, Chueca ha apuntado que este estadio se está convirtiendo en referencia. De hecho, ha afirmado que se está visitando por delegaciones de otras ciudades de España como, por ejemplo, Málaga.
Incluso ha añadido que desde La Liga les han transmitido que el trabajo de los equipos y técnicos y la coordinación de los tres socios de la sociedad Nueva Romareda (Ayuntamiento de Zaragoza, Gobierno de Aragón y Real Zaragoza) "ha sido ejemplar", al buscar soluciones como este campo modular que abre opciones a otros equipos y que lo tienen como referencia, así como por acortar plazos para la construcción del estadio de fútbol definitivo.
Costes económicos
En relación a los costes económicos, Chueca ha explicado que se conocerán en el próximo Consejo de Administración, aunque ha augurado que no habrá variación sobre el presupuesto inicial.
"En la historia de Zaragoza tenemos ejemplos, de hace unos cuantos años. Cuando se acometía una gran obra, la desviación que se ha visto desde el presupuesto original al final y real, ha sido muy muy relevante y muchas veces multiplicando la cifra por algún dígito". Entre estos casos ha citado explícitamente la depuradora de La Cartuja, el Auditorio de Zaragoza o el pabellón Príncipe Felipe.
Sin embargo, ha incidido en que se están cuidando las cuentas de forma estricta y rigurosa con el fin de evitar desviaciones. Con este objetivo, ha recordado que se ha hecho un novedoso contrato para que no haya desviación o, si se produce, sea la mínima posible.