Llevar bolso a veces se puede convertir en un deporte de riesgo, ya que en ocasiones se convierte en el objeto perfecto para los ladrones: algunos de ellos tienen técnicas muy depuradas para abrir las cremalleras, incluso llevándolo puesto, y robar todo lo valioso que tengamos en el interior. Existe un truco muy sencillo, pero a la vez que no conoce casi nadie, para poder pasear tranquilos sin preocuparnos por nuestras pertenencias, ya que en caso de que quieran abrirlo, nos percataremos.
Es muy molesto ir paseando o sentarse en una terraza y estar pendientes todo el rato de nuestras pertenencias, así que algunas personas han compartido su particular (pero eficaz) técnica para poder llevar las dos manos sueltas, sin necesidad de estas sujetando la cremallera constantemente.
Se trata de un truco perfecto, especialmente si queremos viajar en varano a un lugar con muchos turistas, ya que es posible que también haya carteristas intentando robarles sus pertenencias. Sin embargo, es útil para todo el año, espacialmente si se pasa por lugares muy transitados, como algunos transportes públicos.
La pinza
Pues sí, por muy simple que parezca, una pinza de pelo grande, de esas que pueden sujetar todo el cabello en un moño, es la solución perfecta para este problema, además de darle un toque casual al outfit.
Tan solo hay que enganchar la pinza a la correa del bolso (no importa si es corto, largo, tipo bandolera, riñonera...), en el mismo lado donde se encuentra el tirador cuando la cremallera está completamente cerrada.
Al enganchar el pinza, atravesaremos con uno de sus dientes el agujero del tirador, de forma que si alguien quiere abrir la cremallera, no podrá porque está enganchado a la propia pinza, que a su vez conecta con la correa del bolso.