
Los ciempiés son uno de los animales más extraños que los seres humanos pueden encontrarse en la actualidad. Aunque suelen causar miedo a un gran porcentaje de los españoles y españolas, la realidad es que no son mortales. Ahora bien, sí peligrosos.
Y es que su veneno puede causar dolor, hinchazón e incluso reacciones alérgicas en ciertas personas, pero sin ser graves. A pesar de que no tienen exactamente 100, se llaman así por la cantidad de patas que tienen, siendo fácilmente reconocibles, sobre todo durante el periodo veraniego.
En profundidad
Por lo general, su fuente de alimentación son los insectos, moscas y polillas que se encuentran por su camino, saliendo a 'cazar' de noche y escondiéndose por el día bajo piedras y hojas. Pudiendo parecer mentira, lo cierto es que su función en el medio ambiente permite ayudar y controlar determinadas plagas, sirviendo de nivelador en el ecosistema.
Como bien sabemos, es posible encontrar ciempiés en prácticamente todos los lugares del mundo, a excepción de las zonas con climas más fríos. Al parecer, necesitan vivir en áreas donde puedan hidratarse sin grandes dificultades, como los suelos húmedos u hojas de árboles, entre otros.
Más detalles
De ahí que no sea extraño encontrarlos en nuestro hogar o cerca de este. ¿Y qué quiere decir esto? Pues bien, que casi con total seguridad, hay demasiados insectos de los que se alimentan. O lo que es lo mismo, si nos encontramos con frecuencia estos animales, podría evidenciar que existe un problema con alguna plaga.
De encontrarlos en el jardín, es probable que sea por un exceso de humedad. Una situación delicada a la que debemos prestar atención cuantos antes, puesto que la humedad es perjudicial para los seres humanos y puede dañar estructuras de la casa, además de atraer plagas no deseadas.