No tires la cáscara de este alimento: nadie sabe que es un aliado perfecto para tu casa y tu jardín

Son muchos los elementos de cocina que desechamos diariamente, ya que muchas personas no saben que, la mayoría de los restos de comida desperdiciados, se pueden emplear en el hogar, consiguiendo productos ecológicos, sin necesidad de recurrir a químicos con coste adicional y que presentan multitud de beneficios. Es el caso de las cáscaras de las naranjas.

La cáscara de naranja no se puede comer y, a menos que se emplee para rallarla o para hervirla, aromatizando diferentes recetas de cocina, lo más habitual es que acabe en la basura. Sin embargo, este componente orgánico es un aliado perfecto en tareas de jardinería, sobre todo, ahora que ha llegado la primavera y hay que poner a punto el jardín y la terraza.

Así puedes usar la cáscara de naranja

En primer lugar, las cáscaras de naranja son un aliado perfecto para enriquecer el suelo o sustrato en el que vas a plantar las diferentes especies en tu jardín. No solamente sirve para las plantas exteriores, sino también para las de interior. Estas cáscaras pueden aportar nutrientes esenciales, que ayudarán de manera natural al crecimiento de tus plantas. Eso sí, recuerda lavarlas bien para eliminar posibles productos químicos que puedan tener.

Para poder usarlas, simplemente deja que las pieles se sequen para, después, triturarlas, machacarlas o picarlas. Luego, solo tendrás que poner este preparado sobre la tierra, mezclándolo sobre la base de las plantas antes de regar.

Por otro lado, las cáscaras de naranja en las plantas actúan también como repelente de insectos, como es el caso de las hormigas, que evitarán acercarse a los ejemplares que tengas en el jardín. De hecho, también se pueden poner las cáscaras cerca de las puertas y/o ventanas, esperando a que se sequen, y evitando que por estas zonas entren hormigas y otros insectos al interior del hogar.

Las cáscaras de las naranjas también se pueden usar para evitar plagas en tus plantas. No solo repelen a las hormigas, sino que también evitan la aparición de pulgones en las plantas, una de las plagas más comunes y que pueden dañar al completo los ejemplares de tu casa. Así, se puede hacer una mezcla de cáscaras de naranja secas y en polvo, con agua caliente y un poco de jabón lavavajillas. Esta se debe pulverizar sobre las hojas inferiores de la planta, tal y como comenta Adam Weiss, experto jardinero, en declaraciones para Martha Stewart.