
Junto con el lavabo, el inodoro y la ducha o bañera, el bidé ha formado parte de los baños de los hogares durante décadas. Pero, desde hace años, la mayoría de nuevas construcciones son cada vez más pequeñas, haciendo que el espacio dedicado al baño sea más y más reducido. Y ahí, el primer sacrificado suele ser el bidé.
Sin embargo, existe un reducto en España en el que sí o sí encontraremos bidés en todas las casas, ya que la ley así lo exige.
Esta anomalía ocurre en Zamora (Castilla y León), donde la legislación local exige desde el año 1986 a cualquier vivienda unifamiliar la inclusión de un bidé.
De acuerdo con el artículo 72 del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Zamora, promulgado por última vez en 2011, "Toda vivienda unifamiliar tendrá una superficie útil mayor de 20m² con el siguiente programa mínimo […] cuarto de baño completo, compuesto por lavabo, inodoro, bidé y ducha".
Por tanto, este plan establece literalmente la obligación de incluir el bidé en cualquier vivienda unifamiliar, para sorpresa del resto de pueblos y ciudades en las que su uso está claramente en declive.