El Tribunal Supremo de España ha dictaminado que acciones inapropiadas en estos eventos pueden justificar un despido disciplinario por considerarse faltas graves.
Las cenas de empresa durante la Navidad son eventos esperados que buscan fortalecer las relaciones laborales en un ambiente distendido. Sin embargo, es fundamental mantener la profesionalidad, ya que ciertos comportamientos pueden tener repercusiones serias, incluyendo el despido. El ambiente festivo y el consumo de alcohol pueden llevar a conductas inapropiadas. Cada año se reportan casos de agresiones físicas o verbales: insultos, comentarios ofensivos o actitudes violentas hacia compañeros pueden ser considerados faltas graves. Mucho más serios son los casos de acoso sexual: comentarios o comportamientos de índole sexual no deseados son inaceptables y pueden derivar en sanciones severas o directamente en ilícitos penales. El consumo excesivo de alcohol puede llevar a excesos y eso puede hacer a algunos perder el control debido a la ingesta excesiva. Todo ello puede conducir a situaciones embarazosas o peligrosas. Fuentes policiales nos confirman que estas días aumentan también los daños a la propiedad: deteriorar instalaciones del lugar de celebración o bienes de la empresa reflejan una falta de respeto y responsabilidad.
Aunque las cenas de empresa se realizan fuera del horario laboral, los comportamientos durante estas pueden influir en el entorno de trabajo. El Tribunal Supremo de España ha dictaminado que acciones inapropiadas en estos eventos pueden justificar un despido disciplinario, especialmente si afectan la convivencia laboral o la imagen de la empresa. No existen datos oficiales precisos sobre el número de despidos anuales vinculados a conductas inapropiadas en cenas de empresa. Sin embargo, diversos estudios y encuestas indican que un porcentaje significativo de empleados ha presenciado o participado en comportamientos indebidos durante estos eventos, lo que en algunos casos ha llevado a medidas disciplinarias.
Controlar la ingesta de alcohol
Para disfrutar de la cena de empresa sin riesgos, se sugiere moderación en el consumo de alcohol u otras sustancias. Controlar la ingesta de bebidas alcohólicas ayuda a mantener el comportamiento adecuado. El respeto hacia los compañeros es esencial. Mantener una actitud cordial y profesional evita conflictos y malentendidos. Es importante tener conocimiento de las políticas de la empresa. Estar al tanto de las normas internas sobre conductas en eventos corporativos es esencial. Conviene evitar temas controvertidos. Es preferible abstenerse de discusiones sobre política, religión u otros asuntos sensibles que puedan generar tensiones.
Las empresas también deben tomar medidas para garantizar un ambiente seguro durante las celebraciones y establecer normas claras. Conviene comunicar las expectativas de comportamiento y las consecuencias de no cumplirlas. Algunas compañías designan responsables y asignan a determinadas personas que supervisen el desarrollo del evento y puedan intervenir si surge algún problema.
Las cenas de empresa en Navidad son oportunidades valiosas para fortalecer la cohesión del equipo y celebrar los logros del año. No obstante, es crucial mantener una conducta profesional y respetuosa para evitar consecuencias negativas que puedan afectar tanto al individuo como al colectivo laboral. La conciencia y la responsabilidad compartida entre empleados y empleadores son clave para garantizar que estas celebraciones sean agradables y libres de incidentes.