Melinda French Gates, exmujer del magnate tecnológico estadounidense Bill Gates, ha declarado una participación del 4,25% en FCC días más tarde de que ambos -a través de la fundación que mantienen (Bill & Melinda Gates Foundation)- se desprendieran de un 3,8 % del grupo español y rebajaran al 1,8% su peso.
A través de su nueva fundación, Pivotal Philanthropies Foundation, creada en 2015 y dedicada al avance de los derechos de las mujeres, Melinda (separada de Bill Gates en 2021) ha tomado una participación equivalente a 13,3 millones de acciones en FCC, que controla el multimillonario mexicano Carlos Slim, de acuerdo con los registros de este lunes de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Atendiendo a la cotización actual de FCC, estas acciones están valoradas en cerca de 246 millones de euros.
Pasadas las 11:30 las acciones de FCC caían un 0,78% hasta los 12,7 euros y en lo que va de año se han devaluado más de un 8% en la bolsa.
En octubre de 2013 varias entidades vinculadas a Gates, uno de los hombres más ricos del mundo, adquirieron a FCC 7.638.198 acciones del grupo español, equivalentes al 5,736% de su capital social, a un precio de 14,86 euros por título.
El cofundador de Microsoft desembarcó en el accionariado de FCC a través de la sociedad Cascade Investment, con la que controlaba el 3,9% de su participación, y Bill & Melinda Gates Foundation Trust, la fundación que comparte con su exmujer, y a través de la que tenía el 1,75% restante en el grupo constructor y de servicios.
En mayo de este año, la filántropa abandonó esta fundación y ahora ha aflorado un 4,2%, por lo que la suma de la participación de ambos asciende al 6,1%, medio punto por encima del 5,7% que mantenían juntos en Bill & Melinda Gates Foundation Trust.
Hace once años Gates llegó a convertirse en el segundo máximo accionista de FCC por detrás de Esther Koplowitz (quien controlaba el 53,9% de la compañía, mientras que ahora su presencia se limita al 3,2%,), un grupo que ahora controla Slim, y ya manifestó que su inversión era a largo plazo y que no tenía la intención de rebasar el 6% de la compañía española.
La pasada semana se desprendió de un 3,8% de FCC y redujo su participación al 1,8%.